Los 9 mejores cortes de carnes en Bucaramanga
Si hay algo que en Bucaramanga se toma en serio, es el arte de un buen asado. Aquí, el fuego lento, el humo que envuelve la carne y ese primer corte que deja ver la jugosidad del centro son casi rituales sagrados. Aunque la ciudad es famosa por su carne oreada, la verdad es que en los últimos años ha crecido una oferta de restaurantes especializados en cortes de carnes que le hacen honor a la parrilla como debe ser. Desde lomitos suaves que se deshacen con solo mirarlos, hasta cortes gruesos con costra perfecta y corazón rosado, hay para todos los gustos.
Ya sea que te gusten los clásicos argentinos, una picaña bien servida, un tomahawk para compartir o una entraña jugosa con papas a la francesa, Bucaramanga tiene el lugar perfecto para ti. Algunos están escondidos en terrazas discretas, otros se lucen con show de parrilla en vivo o cartas de vino que completan la experiencia. Si eres carnívoro de corazón (o simplemente quieres darte un buen gusto), esta lista está hecha para ti. Prepárate para conocer los rincones donde la carne es la protagonista y cada mordida es una historia diferente. Aquí te va lo mejor de lo mejor.
1. Delvalle BBQ
En el barrio La Victoria, exactamente en la Av. 89 #22-107, se encuentra Delvalle BBQ, un restaurante que le rinde homenaje al fuego lento y los cortes bien hechos. Este lugar no solo destaca por su comida, sino por el ambiente relajado y moderno que ofrece a cualquier hora del día. Abren hasta la medianoche, lo cual lo hace ideal para almuerzos tranquilos, cenas sabrosas o incluso para matar ese antojo nocturno. El espacio es amplio, accesible, pet friendly y con terraza para los que prefieren cenar al aire libre. Aquí, cada detalle está pensado para que disfrutes de principio a fin.
El costo por persona en Delvalle BBQ ronda entre los COP 50,000 y 60,000, dependiendo del corte y acompañamientos que elijas. Aceptan todo tipo de pagos, desde tarjetas hasta NFC, y también se pueden hacer reservas para evitar esperas, especialmente en fines de semana. Cuentan con estacionamiento gratuito, Wi-Fi, menú infantil y un ambiente pensado para grupos y familias. Aunque no es el lugar más económico, la relación entre precio, porción y experiencia es más que justa. Además, si prefieres llevarte el festín a casa, tienen opciones para llevar, domicilio y entrega sin contacto.
La cocina es el corazón de Delvalle BBQ. Platos como el Smoked Morrillo de 250g o el Leo Mixon son recomendados por los comensales por su sabor ahumado, textura suave y sazón impecable. Aunque pueden haber pequeños detalles como una temperatura no ideal en el plato, el equipo se destaca por su respuesta: disculpas sinceras y hasta cortesías como postres caseros para compensar. Aquí se nota que la atención al cliente es prioridad. También ofrecen buenos cócteles, cerveza fría, entradas, vinos y postres que cierran la experiencia con broche de oro. Todo con ese sello BBQ auténtico.
Delvalle BBQ es de esos lugares que, aunque tengan días con mucha demanda, logran ganarse el corazón del cliente por su calidad humana y su sazón sin pretensiones. Es el tipo de restaurante al que uno quiere volver, no solo por la comida, sino por cómo te hacen sentir. Ya sea que vayas en plan de grupo, en familia o simplemente a consentirte con un buen corte, aquí hay espacio y sabor para todos. Y si te quedaste con ganas de más propuestas carnívoras en Bucaramanga, sigue leyendo… que esta ruta de carne apenas comienza.
2. El Cuerno
En el barrio Sotomayor, sobre la Cl. 47 #28-21, se encuentra El Cuerno, un restaurante especializado en cortes de carne que combina elegancia, buen ambiente y sabor. Desde la entrada, destaca por su decoración cuidada, iluminación acogedora y distribución de espacios que invita tanto a reuniones familiares como a cenas más íntimas. El lugar ofrece música en vivo, una terraza ideal para disfrutar al aire libre y una atención que desde el primer momento deja una excelente impresión. Aunque el estacionamiento puede ser limitado, vale la pena organizarse para conocer este espacio que mezcla lo clásico con toques modernos y buen gusto.
El precio por persona en El Cuerno se ubica entre los COP 70,000 y 80,000, una tarifa un poco más alta en comparación con otros restaurantes de carne en la ciudad, pero que se justifica con el nivel de servicio y calidad del producto. Se aceptan todos los medios de pago, incluidas reservas para garantizar un espacio, sobre todo en fines de semana. También cuentan con servicio a domicilio, para llevar y Wi-Fi gratuito. Es un sitio pensado para quienes valoran una experiencia completa y no solo un plato servido. Aquí, cada visita es un detalle bien cuidado.
La cocina de El Cuerno se centra en cortes premium bien ejecutados y presentaciones impecables. Carnes jugosas, al punto justo y servidas con acompañamientos que realzan sin opacar. El personal tiene un conocimiento profundo de la carta y siempre está dispuesto a guiarte con recomendaciones acertadas, lo que mejora aún más la experiencia. Entre vinos, cócteles bien preparados y entradas que abren apetito, cada comida se convierte en un momento especial. Aunque algunos opinan que el precio podría ajustarse un poco, la calidad constante y el excelente trato logran compensar cualquier detalle. Además, sus postres cierran con altura.
El Cuerno es la prueba de que un corte bien hecho no solo se cocina con fuego, sino también con atención al detalle, conocimiento y pasión por el servicio. Es el tipo de restaurante al que uno va para celebrar, consentirse o simplemente disfrutar de una buena carne en un lugar con clase. Su propuesta va más allá de lo gastronómico: es una experiencia completa que te invita a volver. Y si esta parada te abrió el apetito, sigue atento, que en Bucaramanga aún quedan muchos cortes por descubrir y saborear.
3. Carnes & Asados
En pleno barrio Sotomayor, sobre la Cra. 32 #37-23, se encuentra Carnes & Asados, un restaurante que honra su nombre con platos que huelen a parrilla desde la entrada. El lugar cuenta con una terraza al aire libre ideal para quienes disfrutan comer bajo el cielo bumangués, además de espacios accesibles para personas en silla de ruedas. El ambiente es relajado, familiar y bien pensado para recibir desde grupos grandes hasta cenas más tranquilas. Su identidad como emprendimiento liderado por una mujer también le suma carácter al lugar. Aquí, el calor del carbón se siente desde que te sientas a la mesa.
El precio promedio por persona en Carnes & Asados está entre los COP 30,000 y 40,000, lo que lo convierte en una opción bastante accesible considerando la calidad de los platos y la generosidad de las porciones. Aceptan múltiples métodos de pago, tienen Wi-Fi gratuito, baños unisex y ofrecen servicios como domicilio, retiro en puerta, para llevar y consumo en el lugar. Además, cuentan con menú para niños y suficiente espacio de estacionamiento gratuito. Todo esto lo hace ideal para planes familiares, cenas casuales con amigos o simplemente para darte un gustito sin romper el bolsillo.
La cocina aquí es una fiesta de sabores. Las carnes están bien adobadas y cocinadas al punto perfecto, conservando jugosidad y sabor. Entre los favoritos del público están las hamburguesas grandes y sabrosas, y las picadas, que llegan cargadas y listas para compartir. Las entradas también destacan por su sabor, y si quieres refrescarte, las granizadas son un complemento inesperado pero muy bien recibido. Además, hay cócteles, cervezas y aperitivos para acompañar cualquier plato. En cada detalle se nota que aquí se cocina con cariño, sin pretensiones, pero con mucho corazón.
Carnes & Asados es uno de esos lugares que te hacen sentir cómodo desde la primera visita. La atención es cálida, la comida llega rápido y el ambiente invita a quedarse un rato más. Es un restaurante que sabe que no hace falta complicarse cuando lo que se ofrece está bien hecho. Si estás en Bucaramanga y te apetece un corte sabroso sin tanto protocolo, este spot tiene todo para volverse uno de tus favoritos. Y si sigues con hambre de más recomendaciones carnívoras… no te preocupes, que lo mejor apenas comienza.
4. Carneros
En el centro de Bucaramanga, sobre la Cl. 34 #36-36, se encuentra Carneros, un restaurante que desde la entrada te atrapa con su decoración acogedora, su ambiente moderno y un aire relajado ideal para disfrutar de una buena comida. Pensado para todos los públicos, el espacio cuenta con accesibilidad completa, terrazas al aire libre y una vibra informal que no le resta elegancia. Es una excelente opción tanto para un almuerzo familiar como para una cena en pareja o una comida de grupo. Además, es un emprendimiento liderado por una mujer, lo que suma valor a su propuesta integral.
El precio promedio por persona en Carneros va entre los COP 60,000 y 70,000, una tarifa razonable si se considera la calidad de los ingredientes, el tamaño de los cortes y el nivel de atención. Se aceptan pagos con tarjeta, NFC y se pueden hacer reservas con facilidad. También ofrecen servicio a domicilio, entrega sin contacto y consumo en el lugar. Cuentan con Wi-Fi, menú para niños y un espacio amplio para grupos, lo que hace del restaurante un lugar versátil para todo tipo de planes. La experiencia aquí es cómoda, completa y definitivamente pensada para disfrutar.
El menú de Carneros gira en torno a los cortes de carne de alta calidad. El Tomahawk es uno de los más recomendados por su cocción perfecta, jugosidad y el acompañamiento generoso de papas, yuca y ensaladas frescas con aguacate. También hay platos vegetarianos, cócteles bien logrados, vinos y postres que completan la experiencia. La sazón es de esas que invitan a repetir, y el personal, siempre atento, está dispuesto a explicar cada corte y hacer recomendaciones. Aquí, la carne es el centro de todo, pero la experiencia va mucho más allá del plato.
Carneros es uno de esos restaurantes que entienden que comer carne va más allá de la proteína: es un ritual que involucra ambiente, atención y detalle. Cada visita se siente especial, sin ser pretenciosa, y es fácil entender por qué quienes lo prueban, vuelven. Si andas por Bucaramanga buscando un buen corte servido con altura, este lugar tiene que estar en tu lista. Y si te quedaste con ganas de seguir explorando más templos carnívoros… no te vayas muy lejos, que aquí seguimos con más recomendaciones llenas de sabor y fuego.
5. Bistecca Premium Steakhouse
Ubicado en el elegante sector de Sotomayor, sobre la Av. González Valencia #54-28, Bistecca Premium Steakhouse es uno de esos lugares que se destacan por su estilo refinado, su carta sofisticada y, por supuesto, por sus cortes de carne impecablemente preparados. Desde que llegas, el ambiente se siente cuidado, moderno y relajado, con música en vivo y una terraza que invita a disfrutar sin prisa. El restaurante cuenta con accesibilidad total y espacios amplios para grupos o planes familiares. Aquí todo apunta a ofrecer una experiencia de alto nivel, donde la estrella es el producto, pero el ambiente no se queda atrás.
El precio por persona en Bistecca Premium Steakhouse se ubica entre los COP 70,000 y 80,000, una inversión que responde al nivel de los cortes, las bebidas y el concepto general del lugar. Se aceptan pagos con tarjeta, NFC, y se pueden hacer reservas con anticipación. También cuentan con servicio a domicilio, para llevar y entrega sin contacto. Aunque el restaurante cumple con la mayoría de estándares premium, algunos detalles del servicio podrían mejorar, especialmente en el manejo del vino y el conocimiento de la carta. Aun así, la mayoría de clientes repiten por la calidad indiscutible de la carne.
En la carta brillan platos como la picanha, cocinada exactamente al punto solicitado y servida con guarniciones que acompañan sin restar protagonismo. Las carnes están bien seleccionadas, con buena técnica y sabor notable. También ofrecen platos vegetarianos, opciones orgánicas, una selección de vinos que maridan muy bien con los cortes y cócteles como la sangría, que sorprende por su sabor y cantidad. Los postres están pensados para cerrar con altura una comida contundente. Aunque la atención puede tener altibajos, la cocina es consistente y sobresaliente, lo que mantiene la reputación del lugar en lo más alto.
Bistecca Premium Steakhouse es una parada obligatoria para los carnívoros exigentes que buscan una experiencia gourmet en Bucaramanga. Aunque algunos aspectos del servicio podrían afinarse, la calidad de los cortes, el ambiente bien diseñado y la sazón constante lo convierten en uno de los mejores spots de la ciudad para disfrutar carne de verdad. Ideal para cenas especiales, celebraciones o simplemente para darte un gusto como se debe. Y si te quedaste con ganas de seguir descubriendo más templos del fuego y el cuchillo… aquí seguimos con más joyitas carnívoras en la ciudad bonita.
6. Dimarco Parrilla
En la Cl. 52 #30-16, en el sector gastronómico de Sotomayor, se encuentra Dimarco Parrilla, un restaurante emblemático en Bucaramanga que ha sabido mantenerse como referencia de calidad en cortes de carne. Su ambiente mezcla lo tradicional con un estilo moderno y exclusivo que lo hace perfecto tanto para cenas románticas como para comidas familiares o almuerzos de negocios. El espacio es amplio, accesible y pet friendly, con terraza, Wi-Fi y excelente iluminación. Desde que entras, se siente la atención al detalle, la calidez del servicio y esa vibra elegante pero relajada que define a los lugares donde uno siempre quiere volver.
El precio promedio por persona en Dimarco Parrilla oscila entre los COP 70,000 y 80,000, lo cual se alinea con el nivel del servicio, la calidad de sus cortes y la experiencia en general. Aceptan tarjetas, pagos digitales y se pueden hacer reservas fácilmente. Además, el restaurante cuenta con estacionamiento gratuito, tanto privado como en la calle, y ofrece servicios para llevar, entrega sin contacto y domicilio. Es una opción confiable para quienes buscan un sitio de alto nivel sin caer en pretensiones, donde lo que pagas se ve reflejado en cada aspecto del servicio y en el sabor del plato.
La cocina de Dimarco Parrilla está centrada en cortes de carne bien seleccionados y preparados con técnica y esmero. El churrasco es de los mejores de la ciudad, jugoso, con buen punto de cocción y acompañado de guarniciones que complementan sin competir. También ofrecen otras opciones de res, cerdo y aves, vinos, cócteles y una carta de postres que vale la pena explorar. El servicio por parte de los meseros es impecable: atentos, profesionales y conocedores del menú, lo que mejora aún más la experiencia. Aquí, todo está pensado para que el protagonista sea el sabor y el cliente se sienta valorado.
Dimarco Parrilla es uno de esos lugares que se han ganado su lugar con constancia, sazón y buen servicio. No es simplemente un restaurante de carnes, es un sitio con historia y con un estándar alto que logra mantener en cada visita. Ideal para quienes quieren comer bien, sentirse bien atendidos y disfrutar de una atmósfera cuidada. Si estás buscando calidad, atención profesional y uno de los mejores churrascos de Bucaramanga, aquí lo vas a encontrar. Y si te quedaste con ganas de seguir conociendo más templos carnívoros en la ciudad… no te despegues, que esto aún no termina.
7. Locoyote
En la Cra. 34 #35-18, en una de las zonas más movidas de Bucaramanga, se encuentra Locoyote, un restaurante que mezcla el sabor ahumado de la parrilla con una vibra moderna y relajada. Es ideal para disfrutar una cena con amigos o una salida casual en pareja, con espacios al aire libre, ambiente pet friendly y accesibilidad para personas en silla de ruedas. Su decoración es sencilla pero bien pensada, y la atención del personal hace que te sientas bienvenido desde el primer momento. Aquí no se trata solo de comer carne, sino de vivir un rato sabroso, cómodo y sin pretensiones.
El precio por persona en Locoyote ronda entre los COP 30,000 y 40,000, aunque si te animas con entrada, bebida y postre, puedes llegar fácilmente a los COP 50,000 o 60,000. Aun así, la relación costo-beneficio es excelente considerando la calidad de los platos y lo generoso de las porciones. Aceptan pagos digitales, tarjetas y cuentan con opciones de retiro en puerta, para llevar, consumo en el lugar y entrega a domicilio. No es obligatorio hacer reserva, pero si planeas ir en fin de semana, más vale adelantarse. Además, manejan promociones especiales que le dan un plus a cada visita.
En cuanto a la comida, Locoyote se especializa en cortes de res y cerdo cocinados al punto, con sabores marcados y buena técnica en cada plato. El menú está lleno de opciones carnívoras con actitud: hamburguesas jugosas, picadas generosas y platos al grill con salsas caseras. También tienen cócteles bien hechos, cervezas frías y entradas perfectas para abrir el apetito. La sazón es constante y eso se agradece. Todo, desde la presentación hasta el sabor, muestra que aquí se toma la parrilla en serio. Comer en este lugar es saborear un equilibrio entre lo relajado y lo sabroso.
Locoyote es el tipo de restaurante donde uno se siente como en casa: se come bien, se pasa rico y siempre hay ganas de volver. No necesita lujos para enamorar, porque su fuerte está en lo que sirve y en cómo lo hace. Es perfecto para quienes buscan una experiencia informal, con platos honestos y un ambiente que fluye sin complicaciones. Además, es pet friendly, cómodo y versátil. Si ya tachaste este lugar de tu lista carnívora, no te detengas… que Bucaramanga aún guarda muchas sorpresas ahumadas y sabrosas por descubrir. Y nosotros te contamos cuáles son.
8. Filo Angus
En el corazón del Parque Las Palmas, exactamente en la Carrera 29A #44-21, se encuentra Filo Angus, un restaurante que ha sabido posicionarse como uno de los favoritos de quienes buscan cortes de carne con calidad y buen gusto. El espacio es moderno, informal y con ese aire relajado que hace sentir cómodo desde el primer momento. Su terraza es perfecta para quienes disfrutan de comer al aire libre, y además cuenta con accesibilidad total, incluyendo estacionamiento adaptado. Es una excelente opción para una salida familiar o una cena entre amigos en un lugar con estilo, sin complicaciones y con buen sabor.
El costo promedio por persona en Filo Angus oscila entre los COP 30,000 y 40,000, una cifra muy razonable si se considera la calidad de sus carnes y la experiencia general del lugar. Se aceptan tarjetas, pagos digitales y se pueden hacer reservas con anticipación. Además, el restaurante ofrece servicio para llevar, entrega a domicilio y pedidos sin contacto. Tiene Wi-Fi gratuito, espacio para niños y una atención cercana que, aunque puede mejorar en algunos detalles, suele ser cordial. Es una opción accesible, cómoda y confiable para quienes quieren disfrutar de una buena comida sin gastar de más.
La propuesta gastronómica de Filo Angus gira en torno a cortes clásicos bien ejecutados y hamburguesas preparadas con carne de excelente calidad. La presentación de los platos es impecable y cada elemento —desde las salsas hasta las guarniciones— está pensado para sumar sabor. Las combinaciones son sencillas, pero efectivas: jugosas carnes, ingredientes frescos y porciones generosas. La hamburguesa es uno de los platos más recomendados, aunque también destacan sus entradas y bocadillos. Hay cervezas frías, cócteles y vinos que complementan bien la comida. Todo está hecho con cuidado y se nota el compromiso del equipo en cada detalle.
Filo Angus es el tipo de restaurante que logra destacar sin necesidad de exagerar. Su ambiente relajado, buenos precios y comida honesta lo convierten en una opción ideal para quienes quieren disfrutar un buen corte o una burger bien hecha. Aunque a veces el calor puede sentirse, el sabor, la atención y la experiencia en general hacen que valga la pena. Si estás en Bucaramanga y buscas un sitio sabroso, sin formalidades pero con mucha calidad, este lugar no te va a fallar. Y si te animas a seguir con la ruta carnívora, quédate cerca… lo mejor aún no termina.
9. Zekkei
En una de las calles más gastronómicas del barrio Sotomayor, exactamente en la Cl. 42 #29-83, se ubica Zekkei, un restaurante que lleva la experiencia culinaria a otro nivel. Su ambiente moderno y exclusivo, combinado con música en vivo y una atención minuciosa, hacen de este lugar una joya para quienes buscan una cena inolvidable. La decoración es elegante, con espacios accesibles para todos, tanto dentro como en su zona de terraza. Desde el momento en que entras, el servicio atento y la atmósfera sofisticada te invitan a relajarte y disfrutar. Ideal para ocasiones especiales, cenas románticas o para darte un gusto sin culpa.
El precio promedio en Zekkei está entre los COP 80,000 y 90,000 por persona, lo cual refleja la calidad premium del lugar y la propuesta gastronómica que ofrece. Aceptan todo tipo de pagos y se recomienda hacer reserva, ya que la demanda suele ser alta, especialmente en fines de semana. También ofrecen servicio para llevar, entrega a domicilio y sin contacto, adaptándose a todo tipo de necesidades. Hay estacionamiento disponible (aunque es pago), Wi-Fi gratuito y atención personalizada, lo que eleva la experiencia de principio a fin. Cada detalle está cuidado, desde la carta hasta la presentación.
El menú de Zekkei es una fusión exquisita entre lo japonés y lo contemporáneo, con platos como sushi, ramen y cortes con inspiración asiática que sorprenden por su técnica y autenticidad. Las entradas son un acierto para empezar y el postre de maní es una joya que muchos repiten. Además, cuentan con una cuidada selección de vinos, cócteles, té de alta gama y platos vegetarianos para todos los gustos. El equilibrio entre sabor, presentación y porción es parte de lo que hace que cada comida aquí sea recordada. Es, sin duda, un restaurante que va más allá del plato.
Zekkei es sinónimo de experiencia sensorial. Desde la atención dedicada hasta la delicadeza de cada bocado, este lugar no solo se visita, se vive. Es perfecto para quienes buscan algo más que una buena comida: aquí todo está pensado para enamorar el paladar, relajar el alma y elevar los sentidos. Si estás armando tu ruta de los mejores cortes o simplemente quieres sorprender a alguien especial, esta parada es obligada. Y si te quedaste con hambre de descubrir más joyas culinarias en Bucaramanga, quédate cerca… que lo que sigue, también promete.
La carne nos unió… pero aún queda mucho por saborear
Después de este recorrido carnívoro por los mejores cortes de carne en Bucaramanga, queda más que claro que la ciudad no solo tiene buena sazón, sino también un profundo respeto por la parrilla bien hecha. Cada lugar tiene su toque especial: algunos se enfocan en lo tradicional con ese fuego lento que enamora, otros le apuestan a cortes internacionales y presentaciones de autor que sorprenden. Pero todos coinciden en algo: aquí se toma la carne en serio. Y si eres de los que disfruta ver cómo se asa un bife perfecto o de los que cierra los ojos en el primer bocado… sabes que estos lugares te están esperando.
Lo mejor es que esto no se acaba aquí. Bucaramanga sigue creciendo con una oferta gastronómica que va mucho más allá de los cortes premium. ¿Ya probaste los mejores tacos de la ciudad? ¿O te diste el gusto con una buena pasta artesanal? ¿Qué tal una ruta de cocteles o cafés escondidos? En nuestro blog te llevamos por todos esos rincones que vale la pena conocer. Así que sigue explorando con nosotros, porque si algo tiene la ciudad bonita, es que siempre hay un nuevo sabor que descubrir. Y claro, con hambre… mejor.
