6 restaurantes para ver el Mundial de Clubes en Polanco

En Polanco, ver el Mundial de Clubes se convierte en toda una experiencia. No se trata solo de ver el partido, sino de disfrutarlo con estilo, en un restaurante donde la comida es protagonista, las pantallas están perfectamente ubicadas y el ambiente te atrapa desde el primer silbatazo. Esta zona, reconocida por su oferta gastronómica de alto nivel, es el lugar ideal para quienes buscan combinar la pasión futbolera con una experiencia culinaria de primera. Aquí puedes gritar los goles mientras disfrutas de un corte argentino, un ceviche fresco o una pizza recién salida del horno, acompañado de cocteles de autor o una copa de vino bien servida.

En este artículo te traemos seis restaurantes que no solo sirven platillos espectaculares, sino que también son perfectos para seguir el torneo con toda la emoción. Desde espacios acogedores para una salida tranquila, hasta spots con energía vibrante donde cada jugada se celebra como si estuvieras en la cancha. Si lo tuyo es ver el partido en un lugar que combine buena comida, ambiente cool y servicio impecable, quédate. Polanco tiene todo para hacer del Mundial una fiesta inolvidable.

1. Restaurante Carajillo Miyana

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Si vas a ver el Mundial de Clubes con buen gusto, en un lugar que sirva comida de autor y cocteles que sorprenden, Carajillo Miyana tiene todo lo que necesitas. Este restaurante, ubicado en una de las zonas más elegantes de Polanco, combina diseño moderno con ambiente vibrante para que cada partido se sienta como un evento especial. Las pantallas están bien distribuidas y no estorban con la estética del lugar, permitiéndote seguir el juego sin perder el estilo. Aquí el fútbol se vive con clase, entre copas y platos que parecen obra de arte. Es el tipo de lugar que convierte un partido cualquiera en una experiencia inolvidable. Y si gana tu equipo, seguro terminas pidiendo otro carajillo para celebrarlo.

Perfecto para una cena en pareja o una reunión de amigos que disfrutan tanto del fútbol como de la buena mesa, el menú ofrece platillos que combinan técnicas contemporáneas con ingredientes mexicanos. Desde tacos de costilla con trufa hasta arroces, ceviches o cortes de carne perfectamente cocinados, aquí no hay margen de error. La coctelería es una de las más destacadas de la zona, con carajillos en distintas versiones, infusiones especiales y tragos visualmente espectaculares. Ver el torneo aquí es dejarte sorprender por sabores, texturas y una presentación impecable.

El precio por persona ronda entre los $800 y $1000 pesos mexicanos, acorde al tipo de experiencia y calidad que ofrece el restaurante. El ambiente logra un equilibrio entre lo relajado y lo elegante, lo que lo hace ideal para disfrutar un partido sin el caos de un sports bar. El personal está capacitado para ofrecer un servicio de primer nivel, siempre atentos y con recomendaciones precisas para que tu experiencia sea completa. Es un lugar que invita a quedarte, incluso después del último silbatazo. Aquí, el fútbol no interrumpe la cena, la complementa.

Aunque no admite mascotas, Carajillo Miyana es una parada obligada para quienes quieren vivir el Mundial con un enfoque más gourmet. Es de esos lugares donde cada gol se celebra con un brindis bien servido y cada platillo te recuerda por qué elegiste ver el torneo fuera de casa. Ideal para quienes aprecian tanto el fútbol como la buena cocina, este restaurante convierte cada jugada en un maridaje perfecto entre emoción y sabor. Si buscas elevar tu experiencia futbolera sin perder intensidad, aquí tienes una opción que lo tiene todo. Porque en Carajillo, el gol sabe mejor.

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Restaurantes para ver Mundial de Clubes Polanco

2. Rincón Argentino Polanco

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Ver el Mundial de Clubes con un buen corte en el plato y una copa de vino argentino en mano suena como plan perfecto, y eso es justo lo que ofrece Rincón Argentino Polanco. Este restaurante es un clásico en la zona, ideal para quienes disfrutan del fútbol con la misma intensidad con la que disfrutan de una buena comida. Su ambiente tradicional, cálido y elegante lo convierte en el lugar perfecto para ver los partidos con tranquilidad, rodeado de sabor y excelente servicio. Las pantallas están bien ubicadas y el volumen moderado permite seguir la transmisión sin interrumpir una buena charla.

Es ideal para una comida familiar o una tarde de amigos que valoran la calidad en cada detalle. El menú es todo lo que esperas de una parrilla argentina: cortes jugosos al punto, empanadas, chorizos, provoleta, pastas caseras y postres como el flan con dulce de leche que no falla. La carta de vinos es extensa, con etiquetas nacionales e internacionales que elevan aún más la experiencia. Aquí se come con calma, se brinda con gusto y se vive el fútbol con esa pasión elegante que distingue a quienes aprecian el ritual del asado.

El rango de precio por persona va de $700 a $1000 pesos mexicanos, una inversión justa por la calidad del producto, la ubicación y la experiencia. El ambiente es relajado y acogedor, sin caer en formalidades extremas, lo que lo hace ideal para ver el partido en un entorno cómodo y sofisticado. El personal es experto en servicio y sabe cómo acompañar tu experiencia sin ser invasivo. Ya sea en la terraza o dentro del salón principal, la experiencia es consistente: buena carne, buen vino y fútbol en el fondo.

Aunque no admite mascotas, Rincón Argentino Polanco es un lugar donde cada detalle está pensado para el disfrute. Aquí el fútbol no se vive con gritos ni bocinas, se acompaña con cortes bien hechos, copas servidas al tiempo y una atmósfera que convierte cada partido en un evento digno de celebrarse. Es ideal para quienes quieren ver el torneo en un espacio con clase, pero sin complicarse. La experiencia es constante: buena atención, excelente cocina y un ambiente que se siente tan cómodo como elegante. Además, es de esos lugares que invitan a quedarse después del partido, ya sea para seguir con la sobremesa o simplemente disfrutar el momento.

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3. Restaurante Animal Masaryk

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Ver el Mundial de Clubes con estilo y creatividad es posible en Restaurante Animal Masaryk, un espacio donde la fusión gastronómica y el ambiente urbano se encuentran. Este restaurante rompe esquemas con su diseño moderno, iluminación cálida y un concepto culinario que mezcla sabores de México con técnicas internacionales. Las pantallas están integradas sutilmente al entorno, logrando que el fútbol se convierta en parte de la experiencia sin robarse el protagonismo. Aquí se respira tendencia, se come con curiosidad y se disfruta cada partido con la comodidad de un lugar que piensa en todos los sentidos.

Ideal para una salida con amigos o una cena en pareja, el menú es dinámico: tacos reinventados, ceviches con influencias asiáticas, hamburguesas con ingredientes inesperados y platillos que se transforman en cada temporada. La mixología juega un papel central, con cocteles de autor que se presentan como obras de arte, tanto en sabor como en estética. Cada trago complementa los sabores del menú y eleva la experiencia futbolera a un nivel más sofisticado. Aquí, entre cada jugada, también se celebra la innovación y el detalle.

El rango de precio por persona va de $700 a $1000 pesos mexicanos, en línea con la calidad de los ingredientes y la propuesta gastronómica. El servicio es profesional y cercano, ideal para quienes disfrutan el fútbol sin renunciar a una buena conversación o una experiencia visual. El ambiente es relajado pero con ritmo, lo que permite sentir la emoción del partido sin sacrificar comodidad. La decoración, la música y la atención están pensadas para que el cliente se quede, regrese y recomiende. Es más que un lugar para ver partidos, es un destino con carácter.

Aunque no admite mascotas, Restaurante Animal Masaryk ofrece una experiencia tan envolvente que se convierte en el plan ideal para quienes quieren ver el Mundial con una propuesta distinta. Aquí los goles se celebran con cocteles diseñados para sorprender, los platillos marcan tendencia y el ambiente urbano lo convierte en uno de los favoritos de la zona. Es el tipo de lugar donde el partido se vive en pantalla, pero también en cada detalle del servicio y la cocina. Si buscas algo más que el típico sports bar, este restaurante te lleva a otro nivel. Aquí el fútbol se fusiona con la creatividad.

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4. La Piccola Trattoria Polanco

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Si quieres ver el Mundial de Clubes en un ambiente íntimo, rodeado de buena comida y calidez europea, La Piccola Trattoria Polanco es la joya escondida que necesitas. Este restaurante italiano tiene ese encanto que solo las verdaderas trattorias logran: mesas pequeñas, aromas a pan recién horneado, y un ambiente que te transporta directo al corazón de Italia. Las pantallas están bien ubicadas, discretas pero efectivas, ideales para seguir el partido sin romper la armonía del lugar. Aquí el fútbol se vive con una copa de vino en la mano y un plato de pasta frente a ti.

Es ideal para una cena en pareja, una comida con familia, o para disfrutar solo si lo tuyo es vivir los partidos en paz, acompañado de buena sazón. El menú incluye pizzas hechas al momento, pastas frescas, lasañas, risottos y antipastos que funcionan perfecto para compartir. La carta de vinos es breve pero bien curada, y también cuentan con spritz, cocteles italianos y cafés que cierran la experiencia con broche de oro. Es el tipo de lugar donde puedes disfrutar tanto del marcador como del momento, sin apuros ni distracciones innecesarias.

El precio por persona ronda los $500 a $800 pesos mexicanos, razonable para el nivel de cocina y la atmósfera que ofrece. El servicio es cercano, con atención personalizada y recomendaciones que realmente mejoran la experiencia. Es un restaurante donde todo se hace con cariño, desde el saludo al entrar hasta el postre que llega con un espresso bien cargado. Si buscas ver el torneo de una manera más relajada, sin ruido excesivo y con la calidez de un espacio auténtico, este es el lugar. Perfecto para combinar fútbol y comfort food con clase.

Aunque no admite mascotas, La Piccola Trattoria Polanco te hace sentir tan cómodo que no extrañarás nada más. Aquí los goles se celebran con brindis tranquilos, platos llenos de sabor y conversaciones que fluyen mientras el partido avanza. Es un rincón donde el fútbol se disfruta de forma distinta: sin estridencias, pero con mucho corazón. Ideal para quienes quieren saborear cada jugada y cada bocado por igual, en un entorno que invita a quedarse después del partido solo para el gusto de estar ahí. Porque a veces, el mejor lugar para ver el Mundial es una mesa bien servida.

5. Fisher’s Polanco

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Si el plan es ver el Mundial de Clubes con sabor a mar, tragos bien servidos y un ambiente que no para, Fisher’s Polanco es uno de esos lugares que nunca fallan. Este restaurante de mariscos es perfecto para quienes quieren vivir cada partido rodeados de energía, música y platillos que llegan al centro de la mesa para compartir entre jugada y jugada. Las pantallas están bien colocadas, visibles desde distintos puntos, y el ritmo del lugar hace que el fútbol se sienta como parte natural de la experiencia. Aquí no se grita el gol, se celebra con clamato en mano.

Ideal para una comida en familia, un plan con amigos o una tarde de tragos prolongada mientras se juega el torneo, el menú ofrece una variedad amplia: tostadas, ceviches, aguachiles, tacos, pescados al gusto y cocteles que no necesitan presentación. La mixología es fresca, con énfasis en sabores cítricos y preparaciones tropicales que maridan perfecto con el partido. Además, los combos para compartir y promociones en horario de juego hacen que quieras quedarte más de un medio tiempo. Aquí cada minuto se acompaña de sabor.

El precio por persona ronda los $500 a $700 pesos mexicanos, más que razonable para la calidad de los ingredientes y la cantidad de comida. El servicio es rápido, atento y con esa actitud relajada que hace sentir bienvenido a cualquiera. El ambiente siempre está encendido, pero sin llegar a ser abrumador: ideal para ver varios partidos seguidos sin perder el mood. Es de esos lugares donde el partido es la excusa, pero lo que realmente te hace volver es la comida y la vibra. Perfecto para quienes prefieren el fútbol con un toque de costa.

Aunque no admite mascotas, Fisher’s Polanco lo compensa con un ambiente que vibra de principio a fin. Aquí los goles se acompañan con botanas de mar, rondas de micheladas y buena conversación. Es el tipo de restaurante donde puedes quedarte después del partido sin darte cuenta del tiempo, solo disfrutando el momento. Si lo tuyo es celebrar cada jugada entre ceviches y camarones, este lugar será tu nuevo favorito. Porque ver el Mundial no tiene que ser en un bar ruidoso: puede ser en una marisquería que lo hace todo bien. Aquí el sabor y el fútbol se llevan de maravilla.

6. La Mallorquina Polanco

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Ver el Mundial de Clubes entre tapas, vino y buena conversación suena como un plan difícil de superar, y La Mallorquina Polanco lo hace posible. Este restaurante de inspiración española ofrece un ambiente sobrio, acogedor y con ese aire mediterráneo que invita a quedarse. Las pantallas están presentes sin invadir, ideales para quienes disfrutan del fútbol como parte de una experiencia más amplia, sin dejar de lado la elegancia. Aquí no hay bullicio innecesario: se vive el partido con estilo, entre platos bien servidos y atención al detalle.

Es perfecto para una comida en pareja, un plan entre amigos con paladar exigente o incluso una tarde de vinos y fútbol con la familia. El menú incluye clásicos como tortilla española, croquetas, calamares, jamón ibérico y paellas bien servidas. La carta de vinos es un deleite para los amantes del buen maridaje, con etiquetas españolas y nacionales que elevan la experiencia. También cuentan con coctelería ligera y postres como flan o tarta de Santiago para cerrar con broche de oro. Aquí, cada jugada va acompañada de una pausa sabrosa y una copa bien elegida.

El precio por persona ronda los $600 a $900 pesos mexicanos, acorde al nivel de cocina, ambiente y servicio. El lugar mantiene un equilibrio entre lo formal y lo relajado, ideal para quienes buscan ver el partido sin caer en el típico ruido del sports bar. El servicio es impecable, atento y siempre dispuesto a sugerir el maridaje perfecto para lo que estés comiendo. Todo fluye con calma, incluso si el partido está en su punto más tenso. Es un espacio que permite disfrutar del fútbol con otro ritmo, uno más pausado pero igual de emocionante.

Aunque no admite mascotas, La Mallorquina Polanco ofrece una experiencia tan completa que cada partido se convierte en una tarde inolvidable. Aquí los goles se celebran entre brindis, bocados y conversaciones que fluyen con naturalidad. Es ideal para quienes ven el fútbol como una excusa para reunirse y comer bien, más que solo por el marcador. En este restaurante, cada minuto en pantalla se acompaña de sabores profundos, servicio excepcional y un entorno que invita a disfrutar sin prisa. Porque el Mundial también se puede vivir a la española: con pausa, con gusto y con mucho carácter.

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Brindis por el fútbol (y por la comida)

Polanco demuestra que ver el Mundial de Clubes no tiene que limitarse a un sports bar lleno de ruido y pantallas. Esta zona de la ciudad tiene una propuesta para cada tipo de aficionado: desde el que busca cortes argentinos y tradición, hasta el que quiere sorprenderse con cocina fusión, coctelería creativa o un buen arroz español. Aquí cada restaurante tiene su esencia, pero todos comparten algo: el amor por el detalle, el ambiente cuidado y el deseo de ofrecer experiencias completas. Porque en Polanco, el fútbol se acompaña con estilo, se sirve con presentación impecable y se vive entre sabores inolvidables.

Si esta lista te abrió el apetito futbolero y culinario, no te detengas aquí. En nuestro blog tenemos más rutas, más barrios y muchos más lugares donde el balón rueda mientras el sabor estalla. Explora con nosotros otras zonas de la CDMX donde el deporte y la gastronomía se dan la mano en cada jornada. Porque lo mejor del Mundial no solo está en la cancha, también está en la mesa, la copa y la compañía. ¿Listo para el siguiente partido? Nosotros ya estamos preparando la próxima recomendación.

6 restaurantes para ver el Mundial de Clubes en Polanco

1. Restaurante Carajillo Miyana

2. Rincón Argentino Polanco

3. Restaurante Animal Masaryk

4. La Piccola Trattoria Polanco

5. Fisher’s Polanco

6. La Mallorquina Polanco

Brindis por el fútbol (y por la comida)

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