7 restaurantes para celebrar el 10 de mayo en Oaxaca
El 10 de mayo es una de esas fechas que se celebran con el corazón, con sabores que abrazan y momentos que se quedan para siempre. Y si hay un lugar en México donde la comida tiene alma, es Oaxaca. Esta tierra generosa, llena de historia, colores y tradición, convierte cualquier platillo en una fiesta para los sentidos. Desde moles ancestrales hasta cocteles con mezcal artesanal, cada rincón del estado ofrece algo especial para consentir a mamá en su día. Porque ella no solo merece un detalle: merece una experiencia completa, pensada para compartir, agradecer y disfrutar con todos los sentidos. Y en Oaxaca, esa experiencia empieza con un buen platillo y se completa con el corazón.
En esta guía te presentamos siete restaurantes ideales para celebrar el Día de las Madres en Oaxaca. Lugares donde el menú es una carta de amor a la tierra, donde el ambiente se siente como en casa y donde cada platillo es una manera de decir: gracias, mamá. Ya sea con una comida en el corazón de la ciudad, una cena frente a los cerros o un brunch en un jardín escondido, aquí hay opciones para todos los gustos. Prepárate para descubrir espacios que se saborean con el alma y se disfrutan en buena compañía.
1. Restaurante Liquen Oaxaca
Ubicado en el centro de la ciudad, en la colonia Centro, Restaurante Liquen Oaxaca es un espacio que fusiona lo mejor de la cocina contemporánea con las raíces oaxaqueñas, en un ambiente moderno, relajado y lleno de intención. Celebrar el 10 de mayo aquí es brindarle a mamá una experiencia que va más allá de una comida: es llevarla a un viaje de sabores, texturas y aromas que se inspiran en lo mejor de la tierra oaxaqueña. Con una terraza amplia y una microdestilería en casa, este lugar ofrece mucho más que una vista: ofrece una historia. Cada detalle, desde el mobiliario hasta la presentación de los platillos, está cuidadosamente pensado para crear una experiencia sensorial que emociona.
Es ideal para una cena en compañía de parejas o familias, especialmente si se busca sorprender a mamá con una propuesta fresca, elegante y sensorial. En su menú encontrarás una variedad de platillos diseñados para botanear y compartir, todos preparados con ingredientes endémicos de la región. La experiencia se complementa con cócteles artesanales preparados con sus propios destilados, que le dan un giro auténtico a cada trago. Desde el primer platillo hasta el último sorbo, cada detalle está pensado para disfrutar con calma y estilo.
El rango de precio va de $350 a $500 pesos mexicanos por persona, una excelente opción para quienes buscan calidad, creatividad y un ambiente especial sin romper el presupuesto. Sus amenidades incluyen terraza o jardín, música en vivo, salón privado, zona para fumar, Wi-Fi gratuito, y organización de eventos y celebraciones especiales. El servicio es cálido, profesional y atento a cada detalle, lo que complementa la experiencia con una atención cercana y muy personalizada.
Y lo mejor de todo es que admite mascotas, así que toda la familia, incluyendo a los peludos, puede ser parte de este festejo. Celebrar el Día de las Madres en Liquen es decirle a mamá que merece algo único, algo que la conecte con la esencia de Oaxaca pero desde una mirada contemporánea y cuidada. Es brindar con mezcal artesanal, compartir una botana entre risas y dejarse envolver por una atmósfera que invita a quedarse un poco más. Porque cuando el sabor se encuentra con el alma, los recuerdos se hacen eternos.
2. Restaurante Sushido Puerto Escondido
En la animada colonia Rinconada de Puerto Escondido, Restaurante Sushido es un oasis culinario que combina lo mejor de la cocina japonesa y asiática con un ambiente fresco y acogedor. El espacio está diseñado para relajarse, con un salón amplio decorado al estilo japonés minimalista, perfecto para desconectarse del bullicio y enfocarse en la experiencia. Celebrar el 10 de mayo aquí es darle a mamá la oportunidad de descubrir nuevos sabores y pasar un momento diferente junto al mar, en un lugar que pone atención al detalle y la calidad en cada platillo. Todo se siente pensado para que la comida sea una experiencia en sí misma.
Es ideal para una comida o cena con familias o amigos, ya que el menú es sorprendentemente variado y apto para todos los gustos. Hay desde sushi rolls fresquísimos, poke bowls, yakimeshi y sashimi, hasta cortes de carne premium al grill, fusión asiática y opciones vegetarianas. Cada platillo refleja la frescura de los ingredientes locales, muchos de ellos pescados y verduras provenientes de la región, lo que garantiza que cada bocado tenga el verdadero sabor del Pacífico. Además, la carta de bebidas destaca por sus cocteles de sake y mezcal de la zona, así como aguas de frutas de temporada.
El rango de precio va de $250 a $350 pesos mexicanos por persona, lo cual lo convierte en una opción muy accesible para una experiencia de calidad en Puerto Escondido. Entre las amenidades encontrarás Wi-Fi gratuito, música ambiental, zona para fumar y la opción de realizar eventos especiales, celebraciones o reuniones de amigos. El personal es atento y conocedor del menú, siempre listo para recomendar lo mejor según la ocasión o el antojo de los comensales. Aquí, la experiencia no termina con la comida: todo, desde la bienvenida hasta el postre, se siente cuidado y genuino.
Y para completar la experiencia, admite mascotas, así que el festejo puede ser con toda la familia, incluyendo a ese amigo peludo que nunca falta en las mejores celebraciones. Disfrutar el Día de las Madres en Sushido es una forma distinta de sorprender a mamá: dejarse llevar por sabores del mar y de Asia, compartir risas entre sushi y cocteles, y salir con el corazón contento después de una comida fuera de lo común. Aquí, cada ocasión se vuelve memorable y siempre hay un motivo para regresar.
3. Restaurante Bacco Zipolite
Enclavado en la tranquila colonia Las Casitas, frente a las aguas cristalinas del Pacífico, Restaurante Bacco Zipolite es una fusión encantadora entre el sabor mediterráneo y la tradición culinaria oaxaqueña. Este rincón tropical tiene el equilibrio perfecto entre elegancia y relajación, ideal para una fecha tan especial como el 10 de mayo. Su terraza con vista al mar, su ambiente íntimo y su atención al detalle lo convierten en una joya escondida que cautiva desde el primer momento. Cada rincón tiene su magia, pensado para vivir una experiencia con todos los sentidos y compartirla con quienes más queremos.
Es ideal para una cena entre familias o parejas, sobre todo si se busca un lugar donde la calidad, el ambiente y la vista al mar se fusionen en armonía. Su menú está lleno de delicias mediterráneas como pastas frescas, cortes al grill, ensaladas con ingredientes locales y mariscos preparados con técnicas europeas, todo con un toque de sazón oaxaqueño que le da personalidad a cada plato. Las porciones son generosas, los sabores profundos y las presentaciones impecables. Además, su carta de vinos y cocteles incluye opciones nacionales e internacionales que realzan la experiencia gastronómica.
El rango de precio va de $350 a $1,500 pesos mexicanos por persona, permitiendo desde una comida casual hasta una celebración más sofisticada. Sus amenidades incluyen terraza o jardín, música en vivo, Wi-Fi gratuito, estacionamiento cercano, y espacios diseñados para eventos especiales, cumpleaños o cenas románticas. La atención es cercana, profesional y siempre con una sonrisa, algo que suma al ambiente relajado y festivo que caracteriza este restaurante. Aquí, el ritmo es pausado, y cada momento se vive con tranquilidad y sabor.
Y sí, admite mascotas, así que no tienes que dejar fuera a ningún integrante de la familia. Celebrar el Día de las Madres en Bacco Zipolite es regalarle a mamá una experiencia sensorial: el sonido del mar de fondo, el sabor de una pasta al dente con mariscos frescos, la suavidad de una copa de vino bien elegida y la calidez de estar rodeada de quienes la aman. Es más que una cena, es una pausa en el tiempo donde todo se alinea para crear recuerdos duraderos. Porque cuando el cariño se sirve en la mesa, el alma también se alimenta. Y en un lugar como este, el amor por mamá se celebra en cada detalle, sin prisas, con sabor y con el corazón en calma.
4. Restaurante Sur a Norte Oaxaca
Situado en plena colonia Centro de Oaxaca, sobre la calle de Gurrión, Restaurante Sur a Norte es un lugar que destaca por su propuesta atrevida y fresca: cocina estilo Baja en el corazón del sur del país. Este concepto innovador ofrece una experiencia relajada pero con carácter, perfecta para celebrar el 10 de mayo en un entorno moderno, abierto y vibrante. Su terraza invita a quedarse, disfrutar del aire libre y dejarse llevar por una propuesta que se aleja de lo convencional. Aquí, el sabor y el ambiente se encuentran para crear algo verdaderamente único.
Es ideal para una comida o cena entre amigos o familias, especialmente si mamá disfruta de los sabores del mar, las texturas frescas y los ambientes relajados. El menú de Sur a Norte está lleno de platillos que celebran la frescura: tacos de pescado al estilo Ensenada, tostadas de atún, ceviches con un giro creativo y botanas que invitan a compartir. Todo está preparado con ingredientes de calidad y un enfoque moderno que no pierde de vista la esencia de la cocina mexicana costera. Acompañado de una cerveza artesanal bien fría o un mezcal joven, cada platillo se disfruta con ligereza y sabor.
El rango de precio va de $250 a $600 pesos mexicanos por persona, lo que lo convierte en una excelente opción para quienes buscan celebrar con estilo sin complicarse. Entre sus amenidades están terraza o jardín, música en vivo, Wi-Fi gratuito, estacionamiento cercano, y espacios pensados para cumpleaños, eventos casuales o reuniones especiales. El ambiente es relajado pero bien cuidado, con atención eficiente y un personal que sabe crear una experiencia cómoda y amigable. Es el tipo de lugar que se convierte en favorito desde la primera visita, por su autenticidad y buena vibra.
Y sí, admite mascotas, lo que lo hace ideal para incluir a toda la familia en esta fecha tan especial. Festejar el Día de las Madres en Sur a Norte es una invitación a relajarse, a dejarse sorprender por nuevos sabores y a disfrutar sin prisas en un espacio pensado para convivir. Es un homenaje sencillo pero lleno de intención, donde la frescura de los ingredientes se refleja en cada bocado y el ambiente se vuelve el mejor complemento para decir “gracias, mamá”. Aquí, la celebración no necesita adornos: basta con buen sazón, buena compañía y muchas ganas de compartir.
5. Zolem Beach Club Puerto Escondido
Ubicado en plena Playa Zicatela, en la colonia Calle del Morro, Zolem Beach Club es un espacio vibrante y relajado frente al mar que ofrece lo mejor de la vida en la playa: comida deliciosa, buena música, cocteles y una alberca con vista al océano. Celebrar el 10 de mayo aquí es sinónimo de frescura, sabor y mucho ambiente. Desde el desayuno hasta la cena, este lugar es ideal para apapachar a mamá en un entorno libre, natural y lleno de alegría. El sonido de las olas, el sol cayendo en el horizonte y una bebida en mano completan la escena perfecta.
Es ideal para desayuno, comida o cena con familias, amigos o parejas, gracias a su menú versátil y lleno de sabor. Entre los favoritos están los tacos de camarón frito, la hamburguesa Zolem, el carpaccio de salmón y la ciabatta mediterránea. También ofrecen opciones para el desayuno como chilaquiles y pan dulce, perfectos para arrancar el día frente al mar. En cuanto a bebidas, no faltan los clásicos como piña colada, mojito, mezcalita y carajillo. Todo pensado para disfrutar bajo el sol, entre amigos y con los pies en la arena.
El rango de precio va de $85 a $270 pesos mexicanos por persona, lo que lo convierte en una opción accesible sin sacrificar calidad ni ambiente. Sus amenidades incluyen terraza o jardín, música en vivo, pantallas de entretenimiento, zona para fumar, Wi-Fi gratuito, y espacios acondicionados para cumpleaños, citas románticas o días con amigos. La atención es cálida y cercana, ideal para quienes buscan desconectarse del estrés diario y reconectar con lo que realmente importa: compartir momentos inolvidables. Cada visita a Zolem se siente como una mini escapada tropical.
Y sí, admite mascotas, así que tu peludito también puede ser parte de esta celebración tan especial. Festejar el Día de las Madres en Zolem Beach Club es más que una salida a comer: es vivir un día completo de playa, buena vibra y momentos que fluyen al ritmo de las olas. Es regalarle a mamá un día sin prisas, con los pies descalzos, el corazón contento y un trago frío en mano. Aquí, la comida tiene sabor a mar, la música acaricia el alma y la compañía se vuelve el mejor ingrediente. Porque cuando el lugar y el momento se alinean, la celebración se vuelve perfecta.
6. Atha Café & Brunch Oaxaca
Ubicado en la luminosa colonia Centro de Oaxaca, Atha Café & Brunch es ese rincón acogedor que parece hecho para las mañanas tranquilas y los desayunos largos. Con un diseño sereno y minimalista, este café se ha ganado el cariño de locales y visitantes gracias a su ambiente relajado, su excelente cocina y la calidez de su servicio. Celebrar el 10 de mayo aquí es elegir un espacio íntimo y lleno de encanto, donde mamá puede disfrutar de un desayuno gourmet, una charla pausada y ese tipo de calma que a veces tanto se agradece.
Es ideal para un desayuno o brunch en compañía de familiares o amigos, con un menú que mezcla sabores oaxaqueños e internacionales en platillos preparados con ingredientes frescos y locales. Entre los favoritos están los chilaquiles rosas, los omelettes, las enfrijoladas rellenas de huevo con chorizo, y el panini de salmón. Todo acompañado de bebidas como la pink lemonade, smoothies o el café especial de la casa, que se sirven con esmero y presentación cuidada. La música suave y la decoración armónica hacen del ambiente un refugio perfecto para comenzar el día con una sonrisa.
El rango de precio va de $85 a $230 pesos mexicanos por persona, ideal para disfrutar una experiencia deliciosa sin gastar de más. Atha ofrece terraza o jardín, Wi-Fi gratuito, música ambiental, zona para fumar y espacios para celebrar cumpleaños o reuniones especiales. Su atmósfera también es ideal para momentos de coworking o lecturas tranquilas, y su equipo de servicio es amable, atento y dispuesto a compartir recomendaciones para que cada visita sea personalizada y memorable.
Y sí, admite mascotas, lo que lo convierte en el sitio perfecto para un desayuno en familia con todos los miembros incluidos. Festejar el Día de las Madres en Atha es optar por la calidez, la frescura y ese tipo de detalles que hacen que un día común se convierta en algo especial. Es regalarle a mamá un momento para ella, entre sabores delicados, bebidas refrescantes y una atmósfera que se siente como un abrazo. Aquí, cada platillo tiene su historia y cada visita deja una sensación de paz, de esas que se quedan por dentro. Porque a veces, los mejores regalos se sirven en una taza humeante y una sonrisa sincera.
7. Mezcalería Santo de mi Devoción Oaxaca
Ubicada en el corazón de la colonia Centro, Mezcalería Santo de mi Devoción es un espacio que se vive con todos los sentidos. Este lugar trasciende el concepto tradicional de mezcalería para convertirse en un santuario donde la gastronomía, el arte y la tradición oaxaqueña convergen. Celebrar el 10 de mayo aquí es una forma de homenajear a mamá en un entorno lleno de mística, belleza visual y sabores que cuentan historias. Cada rincón está cuidadosamente diseñado para ofrecer una experiencia envolvente, desde la iluminación hasta las obras del artista Sabino Guisu, que decoran el espacio con un lenguaje que conecta lo ancestral con lo contemporáneo.
Es ideal para una cena entre parejas o amigos, sobre todo si mamá disfruta de las experiencias auténticas y sensoriales. El menú es una reinterpretación gourmet de la cocina oaxaqueña, con propuestas como tacos de molleja, tostadas de pulpo, hamburguesa de alfilerillo, guacamole con insectos y mejillones preparados con un toque de creatividad y respeto por los ingredientes locales. La carta de bebidas es otro viaje sensorial, con cocteles como el Cóctel Devoción o el Luna Llena, además de una cuidada selección de mezcales artesanales que celebran el alma de Oaxaca en cada trago.
El rango de precio va de $300 a $500 pesos mexicanos por persona, una excelente inversión para una experiencia tan única y detallada. Las amenidades incluyen Wi-Fi gratuito, música en vivo, salón privado, zona para fumar y organización de eventos especiales o celebraciones íntimas. El personal está capacitado para guiar a los visitantes en la elección de platillos y bebidas, elevando la experiencia con un servicio atento, cálido y profundamente conocedor de la cultura local. Aquí, cada visita se convierte en una oportunidad para conectar con las raíces a través del sabor y la atmósfera.
Y aunque no admite mascotas, su ambiente íntimo y artístico es perfecto para una velada especial sin distracciones. Festejar el Día de las Madres en Mezcalería Santo de mi Devoción es regalarle a mamá una noche de conexión profunda con lo mejor de Oaxaca. Es brindarle sabores que sorprenden, un ambiente que enamora y momentos que se sienten tan auténticos como la tierra misma. Aquí, el amor por la tradición se sirve en cada copa y se saborea en cada bocado, haciendo de este día un recuerdo tan duradero como el mezcal en la memoria. Porque si hay alguien que merece una celebración con alma, esa es mamá.
El mapa de los buenos recuerdos
Oaxaca es un destino que se vive con el corazón, y cuando se trata de celebrar a mamá, su cocina, sus colores y su espíritu se vuelven el mejor escenario. Desde terrazas frente al mar en la costa, hasta brunches acogedores en el centro histórico, estos siete restaurantes son más que lugares para comer: son espacios para compartir, agradecer y crear recuerdos inolvidables. Porque si algo define a una buena celebración, es el sabor que se queda en la memoria y las risas que se comparten alrededor de la mesa. Cada uno de estos sitios fue elegido para que este 10 de mayo tenga todo lo que mamá merece: cariño, sabor y momentos que abracen.
Y si te quedaste con antojo de descubrir más, en nuestro blog encontrarás muchas otras recomendaciones para seguir celebrando y explorando Oaxaca como se debe. Desde rooftops con vistas espectaculares hasta rincones escondidos con sazón casero, estamos listos para guiarte en cada antojo, cada plan en pareja o cada reunión familiar. Porque hay muchas formas de decir “te quiero”, y una de ellas —sin duda— es con una buena comida. Sigue leyendo, que Oaxaca aún tiene mucho por saborear.
