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Los 6 mejores restaurantes mexicanos en Baja California Sur

Baja California Sur es un paraíso que no solo presume de playas turquesa y cielos despejados, sino también de una cocina que celebra con orgullo sus raíces mexicanas. En este estado donde el desierto se encuentra con el mar, la comida mexicana se transforma en una experiencia rica, colorida y profundamente sabrosa. Desde La Paz hasta Cabo San Lucas, pasando por pequeños pueblos con alma de tradición, encontrarás propuestas gastronómicas que combinan lo mejor del recetario nacional con ingredientes frescos del mar, técnicas artesanales y una vibra que solo el sur de Baja sabe dar.

Mejores restaurantes mexicanos Baja California Sur

En este artículo te presentamos los 6 mejores restaurantes mexicanos en Baja California Sur, lugares donde el sazón auténtico, el ambiente cálido y la creatividad se unen para ofrecerte mucho más que una comida: una experiencia que recordarás. Si estás buscando dónde comer un buen mole frente al mar, unos tacos de mariscos con tortillas recién hechas o una reinterpretación moderna de la cocina tradicional, aquí te decimos a dónde ir. Porque Baja California Sur no solo se ve bonito… también sabe espectacular.

1. Casa 1880 Bistro (La Paz)

5/5

En la tradicional colonia Zona Comercial de La Paz, rodeado de calles llenas de historia y a pocos pasos del malecón, se encuentra Casa 1880 Bistro, un restaurante mexicano que celebra la herencia culinaria de nuestro país desde un entorno íntimo, elegante y lleno de carácter. Este bistró forma parte del hotel boutique Casa 1880, una casona restaurada que conserva su esencia colonial con detalles modernos que encantan desde el primer momento. Aquí, cada comida es una experiencia que combina sabor, ambiente y atención a los detalles.

El restaurante es ideal para una comida tranquila al mediodía o una cena especial al atardecer, en un patio interior lleno de vegetación, con mesas bien distribuidas y música suave de fondo. Es perfecto para familias, amigos y parejas, ya que ofrece espacios versátiles: desde mesas al aire libre para compartir con los tuyos, hasta rincones románticos junto a la piscina, ideales para una cita con un toque íntimo. El servicio destaca por ser cercano, atento y siempre dispuesto a ofrecer recomendaciones personalizadas para que cada comensal disfrute al máximo de la propuesta gastronómica.

El rango de precio por persona va de 200 a 400 pesos mexicanos, lo que se traduce en calidad, porciones adecuadas y una carta que respeta los sabores mexicanos sin caer en lo convencional. Aquí puedes encontrar platillos como enchiladas con mole casero, ceviches con pescados frescos del día, tacos con tortillas hechas al momento y postres inspirados en recetas tradicionales. Todo se elabora con ingredientes locales, muchos provenientes del mismo estado, lo que da un carácter auténtico y regional a cada bocado. Además, cuentan con una cuidada selección de vinos mexicanos y mezcales artesanales para acompañar.

Aunque no admite mascotas, el ambiente tranquilo y natural, con vegetación y buena ventilación, hace que la estancia sea sumamente cómoda y relajante. Casa 1880 Bistro abre para desayuno, comida y cena, adaptándose a distintos planes y estilos. Ya sea que busques un lugar para una reunión familiar o una velada romántica bajo las luces cálidas del patio, este restaurante mexicano ofrece una experiencia de hospitalidad y sabor que refleja lo mejor de La Paz: calma, tradición y calidad en cada detalle.

2. Puerta Vieja (Los Cabos)

5/5

En la preciosa colonia Centro de Los Cabos, en un entorno que respira tradición y calidez, se encuentra Puerta Vieja, un restaurante mexicano que plasma la cocina local con respeto y creatividad. Este espacio es ideal para una cena tranquila o una comida relajada frente al mar o en su terraza interior. Desde el momento en que entras, te recibe una atmósfera que combina ladrillo expuesto, madera cálida y arte pensado para reconectar con los sabores de siempre.

Pensado para familias, parejas y amigos, el lugar ofrece áreas amplias para convivir con comodidad, así como rincones íntimos para quienes buscan tranquilidad. Las familias disfrutan de platillos compartidos como costillas adobadas, camarones al mojo de ajo o cremas calientes; las parejas hallan mesas con iluminación tenue perfectas para una velada romántica; mientras que los grupos de amigos se reúnen alrededor de grandes fuentes de platillos tradicionales para disfrutar una experiencia compartida llena de sabor.

El rango de precio por persona va de 250 a 450 pesos mexicanos, reflejando la calidad de sus ingredientes: productos del mar recién capturados, vegetales y hierbas de la región y recetas como los moles caseros, las salsas tatemadas y las tortillas hechas al comal. Entre lo más destacado están los tacos dorados bañados en consomé, la cochinita estilo baja con frijoles negros, enchiladas suizas con crema de la casa y pescados zarandeados con salsa de chile guajillo. Todo servido con dedicación, presentación tradicional y abundancia para compartir.

Aunque no admite mascotas, el ambiente ventilado y bien distribuido facilita una visita cómoda en cualquier temporada. Puerta Vieja abre desde mediodía hasta entrada la noche, permitiendo disfrutar una comida al aire libre o una cena cálida bajo luces suaves. Aquí se celebra lo mejor de la gastronomía mexicana de Baja California Sur: sabores auténticos, ambiente agradable y hospitalidad que te hacen sentir en casa, con el mar cerca como parte del paisaje.

3. Quinta La Peregrina (La Paz)

5/5

En la apacible colonia Centro Histórico de La Paz, entre calles empedradas y casas pintadas de colores cálidos, se levanta Quinta La Peregrina, un restaurante mexicano que encarna la sencillez elegante de la cocina de raíz. Ideal para una comida tranquila en familia o una cena íntima al caer el sol, su atmósfera combina terrazas sombreadas, jardines interiores y una decoración limpia con acentos artesanales que invitan a quedarse.

Diseñado para recibir a familias, amigos y parejas, Quinta La Peregrina ofrece espacios versátiles: desde mesas al aire libre rodeadas de vegetación hasta salones acogedores para una velada más privada. El servicio es atento, con meseros dedicados a guiarte en la carta, explicarte las influencias tradicionales y maridar cada platillo con una bebida que complemente el sabor sin opacar la autenticidad.

El rango de precio por persona oscila entre 180 y 350 pesos mexicanos, una inversión justa considerando la frescura de sus ingredientes y el respeto por las recetas autóctonas. Destacan platos como pescado zarandeado con salsa de chile y limón, sopes de mariscos con ingredientes del día, panuchos estilo sur con guacamole casero, y moles de la región preparados lentamente. Todo con porciones generosas, ingredientes locales y presentaciones cuidadas que reflejan calidez y sabor verdadero.

Aunque no admite mascotas, cuenta con jardines ventilados y áreas sombreadas que permiten disfrutar sin prisas y en contacto con un entorno natural y sereno. Abre desde el mediodía y ofrece servicio hasta las primeras horas de la noche, lo que lo hace ideal para comer antes de un paseo por el malecón o cerrar con una cena bajo estrellas en su terraza. Quinta La Peregrina es un verdadero refugio gastronómico mexicano en La Paz: sobrio, auténtico y profundamente arraigado en la esencia del sur de Baja California Sur.

4. Nemi (La Paz)

5/5

En pleno corazón de la colonia Centro Histórico de La Paz se ubica Nemi, un sofisticado restaurante mexicano que ha conquistado a locales y visitantes con su propuesta de alta cocina basada en ingredientes locales y técnicas de autor. Este espacio es ideal para una cena que se convierte en experiencia: desde que llegas, el ambiente te envuelve con una estética sobria y elegante, música suave, iluminación cálida y un servicio que cuida cada detalle para que el comensal se sienta especial.

Diseñado especialmente para parejas, amigos y grupos pequeños, Nemi es el lugar perfecto para celebrar algo importante, tener una velada íntima o simplemente disfrutar de una experiencia gastronómica distinta. La disposición del restaurante es minimalista, con pocas mesas, lo que permite atención completamente personalizada. El menú se ofrece en formato de degustación, cambiando regularmente según temporada y disponibilidad de ingredientes, lo que garantiza frescura y creatividad constante. El chef Alejandro Villagómez se encarga de llevarte por un recorrido sensorial que reinterpreta la cocina mexicana de forma elegante, mientras el sommelier Andrés Sánchez recomienda maridajes con vinos nacionales, elevando cada platillo al siguiente nivel.

El rango de precio por persona ronda los 500 a 900 pesos mexicanos, dependiendo del número de tiempos y bebidas que acompañen. Los platillos están pensados para sorprender: desde una entrada de mejillones con mantequilla avellanada y chocolate, hasta cortes braseados con puré de plátano macho, flores comestibles, o sopa de alcachofa con notas de chile tatemado. Cada elemento en el plato está ahí con intención y técnica, buscando no solo saciar, sino contar una historia. La presentación es impecable, con vajilla de cerámica artesanal y detalles que hacen de cada platillo una obra de arte.

Aunque no admite mascotas, el entorno interior está perfectamente climatizado, ventilado y diseñado para desconectarte del exterior. Nemi abre sus puertas únicamente por las noches, de lunes a sábado, y trabaja con reservaciones limitadas para asegurar que cada experiencia sea completamente cuidada. Es el tipo de restaurante donde no solo se cena, se vive una narrativa culinaria profunda, donde cada ingrediente tiene un origen, una intención y un porqué. En definitiva, Nemi es uno de los secretos mejor guardados de La Paz, un rincón donde la gastronomía mexicana se reinventa con respeto, técnica y emoción.

5. Metate Cabo

5/5

En el vibrante corredor gastronómico de los Cabos, dentro de la colonia Centro, se encuentra Metate Cabo, un restaurante mexicano que combina tradición, sabor y un toque contemporáneo sin perder la esencia de nuestras raíces. Este restaurante es ideal tanto para una comida concurrida como para una cena relajada con vistas al atardecer o al movimiento de la ciudad después de anochecer. El ambiente destila frescura: tonos terrosos, mobiliario de madera y iluminación cálida que dan la bienvenida desde el primer instante

Diseñado para parejas, familias y amigos, Metate Cabo ofrece mesas amplias para grupos y rincones íntimos para cenas más privadas. El servicio se distingue por su amabilidad y conocimiento de la cocina mexicana: el personal explica con precisión la procedencia y preparación de cada platillo, sugiere combinaciones y da recomendaciones para acompañarlo con mezcales o vinos locales, haciendo que cada visita se sienta personalizada.

El rango de precio por persona va de 200 a 400 pesos mexicanos, lo cual refleja la calidad de sus ingredientes frescos del mar y del valle, técnicas artesanales y recetas reinterpretadas con creatividad y sabor auténtico. En su menú destacan antojos mexicanos como ceviche de pescado del día con chile serrano y mango, tacos de camarón crujiente con salsa tatemada, mole negro con pollo local y guarniciones generosas de arroz y frijoles refritos al comal. Todo presentado con atención visual, porciones generosas y ese característico toque casero elevado por la técnica.

Aunque no admite mascotas, Metate Cabo cuenta con una terraza ventilada y mesas bien distribuidas para que la experiencia sea cómoda y libre de agobios. Abre desde el mediodía hasta la noche, permitiendo disfrutar de una comida frente al mar, o una cena deliciosa mientras cae el cielo estrellado de Baja California Sur. Con su propuesta que celebra lo mejor de la cocina mexicana en un entorno moderno pero acogedor, Metate Cabo es una parada obligada para quienes quieren comer bien, saborear identidad local y compartir momentos memorables.

6. María Corona (Los Cabos)

5/5

En la reconocida colonia Médano–El Tezal de Los Cabos, se encuentra María Corona, un restaurante mexicano que celebra la riqueza gastronómica del país con propuestas auténticas hechas con orgullo. Este espacio es ideal para una cena especial o una comida relajada, donde el sabor se encuentra con la frescura del Pacífico y la estética local. Su ambiente cálido, con paredes de piedra, colores vivos y detalles pintados a mano, evocan el encanto auténtico sin perder comodidad ni estilo.

Diseñado para familias, amigos y parejas, María Corona ofrece un ambiente versátil: mesas amplias para compartir con grupos, zonas más íntimas para parejas, y un entorno animado y alegre que es perfecto para convivir en compañía. El servicio es cordial y atento, con meseros que explican los ingredientes, te cuentan de dónde proviene cada pieza de pescado o corte de carne y recomiendan combinaciones de platillos y bebidas tradicionales, como aguas frescas artesanales o mezcales de producción local.

El rango de precio por persona va de 230 a 420 pesos mexicanos, reflejando la frescura, calidad e identidad de cada preparación. En su menú destacan platillos representativos como taco gobernador con camarón local, cochinita estilo sur con tortillas hechas a mano, mole coloradito con pollo rostizado, sopes de carne mechada y cremas regionales. Todo servido de forma generosa, con presentaciones coloridas que realzan los sabores sin perder autenticidad.

Aunque no admite mascotas, el lugar cuenta con terrazas ventiladas, techado parcial y ambiente relajado que permiten unas comidas cómodas y sin agobios. María Corona abre desde mediodía hasta la noche, con horarios ideales para compartir un almuerzo frente al mar o una cena tranquila bajo el cielo estrellado de Los Cabos. Este restaurante mexicano es una excelente forma de conocer el corazón del sabor en la costa sudcaliforniana: vivaz, auténtico y profundamente mexicano.

Sigue comiendo con nosotros

La gastronomía de Baja California Sur es un tesoro que se saborea a cada paso. En estos seis restaurantes mexicanos, se respira tradición, se honra el ingrediente local y se celebra la creatividad que define al sur del país. Desde propuestas de autor en La Paz hasta cocinas con historia en Los Cabos, lo que comparten todos estos lugares es un amor profundo por México y por la comida bien hecha. Cada platillo es una invitación a disfrutar con calma, con compañía y con todos los sentidos. Aquí, comer no es una pausa: es el destino mismo.

Y si esta ruta de sabor te dejó con antojo de más, te invitamos a seguir explorando nuestro blog. Tenemos recomendaciones sabrosas en cada rincón del país: desde fondas escondidas hasta restaurantes de autor, pasando por antojitos callejeros que merecen una ovación. Porque comer bien no se trata solo de llenar el plato, sino de descubrir historias, sabores y rincones que hacen de México un país con alma en su cocina. Sigue leyendo… lo mejor aún está por servirse.

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