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5 restaurantes para comer barato en Centro Histórico CDMX

Comer bien sin vaciar la cartera es totalmente posible, sobre todo si sabes a dónde ir. El Centro Histórico de la CDMX no solo es el corazón cultural e histórico de la ciudad, también es un paraíso para los amantes de la buena comida a precios justos. Entre calles adoquinadas, edificios coloniales y el bullicio constante, se esconden joyas gastronómicas que ofrecen auténticos sabores mexicanos sin necesidad de romper el cochinito. Ya sea que trabajes por la zona, estés de paseo o simplemente quieras echarte un buen taco, aquí hay opciones que cumplen con las tres B: bueno, bonito y barato.

Restaurantes para comer barato Centro Histórico CDMX

En este listado te vamos a compartir cinco restaurantes que destacan por su sazón, ambiente y precios accesibles. Son lugares donde puedes comer rico con menos de $150 pesos y salir satisfecho. Desde fondas con décadas de historia hasta propuestas nuevas que apuestan por ingredientes locales, el Centro Histórico tiene algo para cada antojo. No todo lo barato tiene que ser insípido o aburrido, y estos lugares son prueba de ello. Así que si estás listo para descubrir rincones llenos de sabor sin sacrificar tu presupuesto, sigue leyendo y apunta estas recomendaciones para tu próxima visita al Centro.

1. Templo Mezcalería

5/5

Este restaurante-bar se encuentra en la colonia Centro Histórico, una zona icónica de la Ciudad de México que guarda historia, cultura y, claro, excelente comida a precios accesibles. Templo Mezcalería destaca entre la oferta del centro por su ambiente relajado y su menú creativo con ingredientes tradicionales. Aquí puedes probar platillos únicos como tacos de chapulines o sopes con quelites sin preocuparte por vaciar tu cartera. Es un espacio ideal para los que buscan salir de la rutina sin gastar mucho. Entre lo moderno y lo prehispánico, este lugar se ha convertido en un favorito de los que saben comer bien. Su ambiente, comida y ubicación lo hacen un tesoro escondido para el paladar curioso.

Es ideal para cena gracias a su iluminación tenue y su atmósfera íntima que invita a quedarse un buen rato. Además, es ideal para amigos, ya que el lugar tiene un aire relajado y amigable, perfecto para echar el chal mientras se disfrutan unos mezcales. Los grupos se sienten cómodos en sus mesas comunales, mientras comparten tlayudas y antojitos mexicanos sin preocuparse por la cuenta. Aunque también puedes ir en pareja, el ambiente es más informal que romántico, lo cual lo hace más adecuado para salidas casuales. Es el tipo de lugar donde una noche comienza con buena comida y termina con risas. Perfecto para desconectarse sin tener que gastar en grande.

El rango de precio es de $300 a $500 pesos mexicanos por persona, dependiendo de si solo comes o si también pides un par de tragos. Esto lo posiciona como una excelente opción si buscas experiencias diferentes sin que el bolsillo sufra. Puedes pedir un plato fuerte y compartir entradas sin rebasar ese presupuesto. Además, los tragos con mezcal, aunque originales, no se disparan en precio como en otros lugares de la ciudad. Es un lugar justo: lo que pagas corresponde a la calidad, presentación y originalidad del menú. No es una fonda, pero tampoco es un sitio caro. Aquí, comer barato significa comer bien, con sazón y con alma.

El restaurante-bar admite mascotas, así que si no quieres dejar a tu lomito en casa, puedes traerlo contigo. Hay mesas en exterior donde los perros son bienvenidos, lo que lo hace aún más atractivo para quienes salen en plan relajado. Esto suma puntos si buscas un sitio amigable, sin pretensiones y con libertad para disfrutar. Muchos lugares céntricos no son pet-friendly, por lo que esta es una gran ventaja. Además, el ambiente es tan chill que incluso los animales se sienten cómodos. En resumen, Templo Mezcalería lo tiene todo: sabor, precio justo, buena vibra y apertura para todos, incluso para tus amigos peludos.

2. Restaurante Fisher’s Centro

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Centro Histórico, una zona que combina historia, movimiento y una gran variedad de opciones para comer bien sin gastar mucho. Fisher’s Centro destaca por su propuesta de mariscos frescos, bien servidos y con ese toque costeño que tanto gusta. Aquí puedes disfrutar desde ceviches hasta tacos de camarón, todo preparado al momento. Es una excelente opción para quienes andan por el centro y quieren algo diferente a lo típico, sin que el precio sea un problema. La ubicación es perfecta para una parada de comida en medio de un día de trabajo, turismo o simplemente para darse un gusto bien merecido.

Es ideal para comida, especialmente si buscas una experiencia fresca, ligera y con mucho sabor a mar. Es ideal para familias, ya que el ambiente es amplio, cómodo y sin complicaciones, perfecto para niños, adultos y todo aquel que disfrute del buen comer. Los mariscos suelen ser más caros, pero en Fisher’s encuentras opciones accesibles sin sacrificar calidad. Su menú es variado, así que cada quien puede elegir algo a su gusto. Además, el servicio es rápido y amable, lo cual hace toda la diferencia cuando se va con varios. En resumen, es un sitio práctico, confiable y con mucho sabor.

El rango de precio es de $250 a $400 pesos mexicanos por persona, lo cual es muy razonable considerando que se trata de mariscos frescos y bien servidos. Puedes pedir una tostada, una sopa o hasta compartir un platillo sin que la cuenta se dispare. Si vas en grupo, es fácil organizarse para pedir varios platillos al centro y probar de todo. Incluso tienen promociones y combos que hacen rendir mejor tu presupuesto. Comer mariscos en la ciudad no tiene por qué ser caro, y Fisher’s es una clara prueba de ello. Calidad, cantidad y precio justo, todo en un solo lugar.

El restaurante admite mascotas, lo que lo hace todavía más atractivo si no quieres dejar a tu peludo en casa. Hay espacios al aire libre donde se puede comer tranquilo en compañía de tu mascota. Esta opción es cada vez más buscada por los comensales que disfrutan salir sin dejar a nadie atrás. Fisher’s Centro entiende esto y ofrece una experiencia relajada, sabrosa y abierta para todos. Con su combinación de buen ambiente, precios accesibles y apertura pet-friendly, es una excelente opción para quienes buscan un buen lugar para comer barato, sin dejar de disfrutar lo mejor del mar.

3. Thook Restaurante Pizza

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Centro Histórico, en una esquina tranquila que contrasta con el ritmo acelerado del corazón de la ciudad. Thook es una opción fresca y juvenil que apuesta por la pizza como su estrella principal, pero con un giro inesperado: sabores mexicanos y combinaciones únicas. Aquí no solo se viene a saciar el antojo, sino a descubrir propuestas diferentes, como la pizza de cochinita o de pastor. El lugar tiene un diseño moderno y acogedor, ideal para una pausa casual sin prisas. En medio del caos citadino, Thook es ese lugar relajado donde se come bien sin gastar mucho.

Es ideal para comida, especialmente si tienes antojo de algo sabroso, abundante y con ese toque callejero que tanto gusta. Es ideal para amigos, por su ambiente casual, sus promociones de grupo y su estilo relajado. Las porciones son generosas, y compartir pizzas entre varios es parte de la experiencia. Además, el lugar tiene una vibra joven y descomplicada que invita a quedarse. Ideal para quienes quieren comer rico, sin tanto protocolo y con sabores que sorprenden. No es solo pizza, es creatividad sobre masa con un enfoque local muy bien logrado.

El rango de precio es de $150 a $300 pesos mexicanos por persona, lo cual lo convierte en una opción muy atractiva si tu plan es comer bien y llenar el estómago sin romper el presupuesto. Las pizzas son grandes, ideales para compartir, y si vas con alguien más, el gasto se reduce aún más. También hay opciones de bebidas accesibles y combos que se ajustan a todos los bolsillos. Thook demuestra que comer pizza no tiene que ser genérico ni costoso. Aquí la calidad y el precio conviven perfectamente, haciendo del lugar un favorito del centro.

El restaurante admite mascotas, así que si estás paseando con tu perro por el Centro Histórico, puedes parar en Thook sin preocuparte. Hay espacio en la terraza donde tu compañero peludo será bien recibido, lo cual le suma puntos al lugar. Esta apertura lo convierte en una parada perfecta para quienes buscan relajarse con su mascota después de una caminata. Es una experiencia libre, sin reglas innecesarias, en un lugar que entiende el ritmo de la ciudad. Comer barato, bien y en buena compañía —humana o canina— es posible en Thook. Un rincón que se ha ganado su lugar por hacer las cosas diferentes.

4. Estudio Mezcal

5/5

Este restaurante-bar se encuentra en la colonia Centro Histórico, en una zona llena de vida donde la gastronomía mexicana se celebra todos los días. Estudio Mezcal es un espacio pequeño pero vibrante, ideal para quienes buscan sabores auténticos en un ambiente relajado. Con su estilo urbano y decoración sencilla, el lugar se ha convertido en un punto de encuentro para los que aman el mezcal y la buena comida sin lujos ni precios elevados. Aquí, el enfoque está en la experiencia: buena música, buenos tragos y platillos con carácter. Es un sitio ideal para descubrir nuevas combinaciones y relajarse sin gastar de más.

Es ideal para cena, sobre todo si lo que quieres es terminar el día con buena energía, sabores intensos y una copa de mezcal en la mano. Es ideal para parejas, gracias a su iluminación tenue, música suave y atención personalizada. También es un lugar perfecto para conversar y disfrutar de platillos mexicanos reinterpretados de forma creativa. Aquí no se trata de comer rápido, sino de saborear cada bocado. Desde un aguachile hasta un taco con salsa tatemada, todo tiene su historia. Y como el ambiente es íntimo, se presta para cenas largas sin prisa.

El rango de precio es de $200 a $350 pesos mexicanos por persona, ideal para quienes quieren calidad sin pagar de más. Hay opciones para compartir, platillos individuales, y promociones que hacen que cada peso valga. Además, el precio de las bebidas es justo, especialmente para tratarse de destilados artesanales. Comer aquí no solo es sabroso, también es accesible. Puedes salir satisfecho sin sentir que fue un gasto innecesario. Es una excelente opción si te gustan los sabores tradicionales con un giro moderno, y no quieres salir del centro para encontrarlos.

El restaurante-bar admite mascotas, lo cual lo convierte en un espacio amigable y abierto para todos. Si te gusta salir con tu perro o simplemente no quieres dejarlo solo en casa, Estudio Mezcal es una gran opción. Hay áreas donde tu mascota es bienvenida, y el ambiente relajado lo permite. Esto añade un plus a la experiencia, ya que pocos lugares del centro ofrecen esta posibilidad. Aquí puedes disfrutar sin preocuparte por restricciones. Estudio Mezcal entiende que una buena comida también se trata de compartirla con quienes más quieres, incluso si tienen cuatro patas.

5. Restaurant Guardiola

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Centro Histórico, muy cerca de algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Restaurant Guardiola combina lo clásico con un toque contemporáneo en un espacio cómodo, ideal para una pausa durante el día. Aquí la comida mexicana es protagonista, con un menú amplio y bien servido, perfecto para quienes buscan buen sabor sin gastar de más. Es uno de esos lugares que sorprende por su calidad y precios accesibles. El ambiente es tranquilo, con mesas al aire libre y atención rápida, justo lo que se necesita en una zona tan concurrida.

Es ideal para comida, sobre todo si estás por el centro y buscas una opción que sea sabrosa, rápida y sin pretensiones. Es ideal para familias, gracias a su menú variado y porciones generosas que se adaptan a todos los gustos. Desde enchiladas hasta cortes, aquí puedes encontrar algo para cada antojo, sin tener que preocuparte por la cuenta. También es una excelente opción para quienes trabajan por la zona y quieren comer bien sin romper el presupuesto. El servicio es eficiente y el ambiente familiar se presta para reuniones tranquilas. Un sitio honesto, bien ubicado y confiable.

El rango de precio es de $180 a $300 pesos mexicanos por persona, lo que lo convierte en una alternativa accesible dentro del centro. La relación calidad-precio es de las mejores en la zona, considerando las porciones y el sabor casero que ofrece. Incluso con bebida incluida, puedes comer completo y quedarte satisfecho. Tienen menús del día que incluyen entrada, plato fuerte y bebida, ideales para quienes quieren economizar sin sacrificar sabor. Comer aquí no solo es barato, también es una experiencia que reconforta. Es de esos lugares que te hacen regresar.

El restaurante admite mascotas, algo que cada vez más comensales agradecen, sobre todo quienes disfrutan salir a pasear con su perro por el centro. Tienen espacio en terraza donde tu mascota será bienvenida sin problema. Esta flexibilidad le suma valor al lugar, haciéndolo aún más acogedor. No es común encontrar restaurantes pet-friendly con comida mexicana bien hecha y a buen precio, así que Guardiola se anota un punto importante. Aquí puedes disfrutar de una comida completa, sin prisas ni restricciones. Un lugar que entiende lo que es comer rico, sin complicaciones y con toda la compañía que quieras.

Sabor sin culpa ni gastos

Comer barato no significa conformarse con lo mínimo, y estos cinco lugares en el Centro Histórico lo demuestran con creces. Cada uno ofrece experiencias distintas, sabores intensos y precios que no asustan a la cartera. Desde mariscos frescos hasta pizzas con toque mexicano, la variedad es tanta que no hay excusas para no salir a probar algo nuevo. Ya sea que vivas cerca, trabajes por la zona o simplemente estés de paso, estas opciones son perfectas para comer rico sin complicaciones. La próxima vez que estés por el centro, olvídate de la comida rápida genérica y apuesta por algo con más corazón.

Y si te quedaste con antojo de más, no te preocupes: esto apenas es el comienzo. En nuestro blog tenemos recomendaciones para todos los gustos, presupuestos y zonas de la ciudad. Cada colonia tiene sus secretos bien guardados y nosotros estamos aquí para ayudarte a descubrirlos. ¿Buscas tacos en la Roma? ¿Cafés escondidos en Coyoacán? ¿Cenas románticas en la Condesa? Dale una vuelta a nuestras guías y déjate sorprender. Porque en esta ciudad, comer bien y barato no es una excepción, es una costumbre. Síguenos para descubrir cada rincón comestible que vale la pena conocer.

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