5 restaurantes para comer en Cuaresma en la colonia Del Valle
Si estás buscando dónde darte un buen gusto durante la Cuaresma sin romper las reglas, la colonia Del Valle tiene todo lo que necesitas. Este barrio chilango se ha convertido en un verdadero paraíso gastronómico, y durante esta temporada, muchos de sus restaurantes sacan lo mejor de su cocina para ofrecer opciones deliciosas sin carne roja. Desde mariscos fresquísimos hasta platillos creativos con vegetales y sabores intensos, la oferta es tan rica que no vas a extrañar la carne ni tantito. La Cuaresma no tiene por qué ser aburrida, y en Del Valle, mucho menos.
En este recorrido te vamos a contar cuáles son esos 5 restaurantes imperdibles para comer rico en Cuaresma sin salir de la ciudad. ¿Un aguachile picosito, unos tacos de pescado estilo Baja o una pasta cremosa con camarones? Sí, por favor. Prepárate para conocer lugares con buen ambiente, excelente servicio y platillos que se antojan desde la carta. Y lo mejor: todos están en una de las colonias más caminables y agradables de la CDMX.
1. Marisquería Del Valle Sucursal Tlacoquemecatl
Ubicada en pleno corazón de la colonia Del Valle, Marisquería Del Valle Sucursal Tlacoquemecatl es una joya para los amantes del buen comer que quieren respetar la Cuaresma sin dejar de consentirse. Este restaurante se ha ganado su lugar por ofrecer mariscos de primera en un ambiente relajado, cálido y con ese aire familiar que se antoja para comer sin prisas. Es ideal para una comida larga de fin de semana o incluso para un almuerzo entre semana con sabor a mini escapada al mar. Lo mejor es que su espacio es amplio, con terrazas y áreas pensadas para todos los miembros de la familia, incluyendo a los más pequeños. El rango de precios va de $300 a $500 pesos mexicanos por persona, y una gran ventaja es que sí admite mascotas, así que puedes ir con toda la familia, hasta la de cuatro patas.
El menú está lleno de opciones que se antojan, como ceviches, cocteles, filetes de pescado, camarones en varias preparaciones y hasta un tradicional arroz con mariscos que está para chuparse los dedos. Todo lo preparan con ingredientes súper frescos, y eso se nota en cada bocado. Además, los sabores están perfectamente balanceados, logrando que cada platillo tenga ese toque casero pero con sazón de experto. En temporada de Cuaresma, es el tipo de lugar que se vuelve aún más atractivo porque sabes que vas a comer delicioso sin necesidad de carne roja. Perfecto para un viernes santo o cualquier día de la semana donde quieras cuidarte sin sacrificar el sabor.
Uno de los plus de este lugar es su ambiente: cálido, familiar y sin pretensiones. Ideal para una comida larga y tranquila, de esas que se disfrutan sin prisas y con buena compañía. Si vas con niños, también hay opciones para ellos en el menú, y el espacio es lo suficientemente cómodo para que todos se sientan a gusto. El servicio es amable, atento y muy rápido, lo cual suma mucho a la experiencia. Además, cuentan con una terraza muy agradable, perfecta para comer al aire libre y disfrutar del buen clima mientras te deleitas con los sabores del mar.
En resumen, Marisquería Del Valle es de esos spots que combinan sabor, ambiente y tradición. No sólo cumple con los requisitos de la temporada, sino que lo hace con estilo, ofreciendo platillos que realmente se disfrutan. Si estás buscando dónde comer rico durante la Cuaresma en la colonia Del Valle, aquí tienes una opción que lo tiene todo: buena comida, ambiente relajado, precios justos y la posibilidad de ir con toda la familia, incluyendo a tu mascota. Una visita que seguro querrás repetir.
2. El Peladito Viaducto
El Peladito Viaducto es un rinconcito de sabor sinaloense que te transporta directo a la costa del Pacífico sin salir de la colonia Del Valle. Es ideal para una buena comida con amigos, en un ambiente relajado, colorido y lleno de energía. Aquí, la música de banda, el olor a mariscos y la decoración tipo estadio de béisbol hacen de cada visita una experiencia única y súper divertida. Con precios que van de $50 a $500 pesos mexicanos por persona, es una excelente opción para comer delicioso sin romper el cochinito. Y sí, admite mascotas, así que puedes venir con tu lomito sin problema.
Este lugar es un festín para quienes están siguiendo la tradición de la Cuaresma, pero no quieren sacrificar el sabor. Platillos como el pescado zarandeado, los camarones Victoria, el pulpo atropellado y las tostadas estilo Sinaloa son solo algunas de las joyitas del menú. Todo está hecho con ingredientes fresquísimos y con ese sazón norteño que enamora. Ideal para un viernes santo o cualquier día donde el cuerpo te pida mariscos llenos de sabor y con ese toque picosito tan adictivo.
El ambiente es perfecto para echar el chal con los amigos o para ver el partido mientras disfrutas de unas margachelas bien frías. También cuentan con terraza y pantallas gigantes, lo cual le da un plus a la experiencia. Si vas en pareja, también hay opciones más tranquilas para compartir un pescado al centro y terminar la velada con un buen carajillo. Sea cual sea el plan, en El Peladito se pasa bien, se come mejor y siempre hay algo que celebrar.
Durante la Cuaresma, este lugar se vuelve aún más especial, ya que muchos de sus platillos están pensados justo para quienes no comen carne roja. Así que si andas buscando dónde cumplir con la tradición sin perderte de una buena comida, El Peladito Viaducto es una parada obligada en la Del Valle. Entre mariscos, música y ambiente alegre, seguro sales feliz y con ganas de volver.
3. Restaurante Costeñito del Valle
Si buscas un lugar alegre, familiar y lleno de sabor para pasar la Cuaresma, Restaurante Costeñito del Valle es justo lo que necesitas. Este restaurante en la colonia Del Valle tiene un ambiente relajado entre semana y se transforma en todo un spot con vibes de bar durante los fines. Es ideal para disfrutar una buena comida con familia, especialmente porque cuenta con área infantil y hasta niñeras para que los peques estén felices mientras tú te relajas. El rango de precios va de $59 a $295 pesos mexicanos por persona, así que es bastante accesible. Y lo mejor, sí admite mascotas, así que nadie se queda fuera del plan.
Durante la Cuaresma, el Costeñito saca a relucir lo mejor de su cocina de mar. Aquí encuentras desde cocteles de camarón y ceviches fresquísimos hasta tacos de pescado y filetes bien servidos. Sus sabores son alegres, frescos y con ese toque costeño que tanto se antoja en esta temporada. Es perfecto para quienes siguen la tradición del viernes santo pero no quieren renunciar a comer rico. Los ingredientes son de excelente calidad y la presentación de los platillos invita siempre a tomarle foto antes de probar.
Además del menú, lo que hace especial a este restaurante es su ambiente. Hay pantallas para ver partidos, música en vivo algunos días y una terraza ideal para disfrutar del buen clima. El lugar tiene ese balance perfecto entre ambiente familiar y buena vibra para pasar un rato a gusto. Ya sea que vayas con tu pareja, tus hijos o hasta el grupo completo, aquí hay espacio para todos y servicio de primera.
Restaurante Costeñito del Valle se convierte en uno de esos lugares a los que quieres volver, especialmente durante Semana Santa, porque tiene todo: sabor, ambiente y atención de diez. Aquí puedes respetar la tradición de no comer carne roja, sin que eso signifique comer aburrido o quedarte con hambre. El menú está diseñado para que cada platillo tenga ese sabor fresco y tropical que tanto se antoja en esta temporada. A eso súmale que el lugar es accesible, amigable y con un ambiente que invita a quedarte un rato más. Si estás por la colonia Del Valle y buscas una experiencia sabrosa, ligera y divertida, este lugar cumple y rebasa expectativas. La vibra del lugar, la variedad de platillos y la posibilidad de ir con tus hijos o con tu mascota lo hacen un básico para la temporada. Aquí, cada visita es como una escapada a la playa… sin salir de la ciudad.
4. Restaurante Dragon Grill Del Valle
Si estás buscando una opción diferente para esta Cuaresma, Restaurante Dragon Grill Del Valle es una joya con onda asiática ubicada en la colonia Del Valle. Su propuesta se basa en cocina oriental hecha al momento, garantizando frescura en cada platillo. Es ideal para una comida tranquila en pareja, aunque también es perfecto para una reunión casual con amigos que buscan algo fuera de lo común. El ambiente es moderno, relajado y con detalles que te hacen sentir en un rincón de Asia en plena CDMX. El rango de precios va de $300 a $500 pesos mexicanos por persona y, por si fuera poco, sí admite mascotas, así que puedes ir con tu peludo sin problema.
Durante Semana Santa, este restaurante es un excelente spot para quienes quieren respetar la tradición de no comer carne roja pero sin caer en lo típico. Su menú ofrece opciones como arroces salteados con mariscos, rollos primavera vegetarianos, noodles con camarones y ensaladas con toques orientales. Cada platillo tiene ese sabor profundo y especiado tan característico de la cocina asiática, perfecto para salir de la rutina sin romper con las reglas de la temporada. Además, las porciones son generosas y la presentación es impecable.
El lugar cuenta con terraza y pantallas para quienes quieren una comida relajada pero con un poco de ambiente. También tiene área infantil, lo que lo hace ideal si vas en plan familiar. El servicio es ágil y atento, y están muy enfocados en que cada cliente viva una experiencia completa, desde el sabor hasta la comodidad. Ya sea que vayas entre semana o en fin de semana, siempre encuentras un espacio acogedor para disfrutar.
Dragon Grill Del Valle se ha ganado su lugar entre los favoritos de la zona por ofrecer algo distinto, con calidad y sabor. Durante la Cuaresma, es una opción creativa para quienes aman los sabores orientales y buscan una experiencia gastronómica distinta. Aquí, los viernes santos saben a curry, soya, jengibre y mariscos, y eso… se agradece.
5. El Peladito Del Valle
Si andas buscando mariscos con sabor auténtico del Pacífico para disfrutar durante la Cuaresma, El Peladito Del Valle es el lugar ideal. Este spot en la colonia Del Valle es perfecto para una buena comida con amigos, aunque también tiene el ambiente perfecto para ir en pareja o incluso con la familia. El lugar es alegre, con decoración inspirada en un estadio de béisbol y música de banda que le da toda la vibra sinaloense. El rango de precios va de $500 a $700 pesos mexicanos por persona, y por si fuera poco, sí admite mascotas, así que puedes compartir la experiencia con tu compañero peludo.
Durante Semana Santa y los viernes de Cuaresma, El Peladito se luce con su menú lleno de opciones libres de carne roja pero cargadas de sabor. Puedes probar el pescado zarandeado, el pulpo atropellado, camarones Victoria, o la famosa Fuente de Mariscos. Además, sus tostadas estilo Sinaloa como La Sinaloense o La Sangrona son una verdadera delicia para abrir el apetito. Cada platillo está preparado con ingredientes frescos y un sazón que te hace sentir como si estuvieras comiendo en la playa, aunque estés en plena CDMX.
El ambiente en El Peladito es un show en sí mismo. Pantallas gigantes para ver partidos, música en vivo en ciertos días y una terraza para disfrutar del clima hacen que cualquier comida aquí se convierta en una experiencia completa. Si vas con amigos, es perfecto para pasar la tarde con margachelas de sabores y platillos al centro. Si vas en pareja, pueden compartir una cena sabrosa acompañada de cocteles como El Color de tus Ojos o un buen carajillo para cerrar con broche de oro.
Este lugar se convierte en una excelente opción para respetar la Cuaresma sin tener que conformarte con lo mismo de siempre. Aquí se come rico, se pasa bien y el ambiente es tan bueno que te dan ganas de quedarte más tiempo. El Peladito Del Valle es más que un restaurante, es un pedacito de la costa norteña en el corazón de la ciudad.
Del Valle, el paraíso de la Cuaresma
La Cuaresma no tiene por qué ser sinónimo de sacrificio culinario, y estos cinco restaurantes en la colonia Del Valle lo demuestran con creces. Desde mariscos estilo Sinaloa que te transportan directo a la playa, hasta propuestas asiáticas llenas de sabor y originalidad, la variedad está cañona. Lo mejor es que cada lugar tiene su propia personalidad: algunos son ideales para una tarde relajada con la familia, otros para compartir risas con amigos, y hay hasta opciones más íntimas si andas en plan de pareja. Comer bien y respetar la tradición religiosa sí se puede, y más en una colonia donde el sabor se vive en cada esquina.
Así que ya lo sabes: la próxima vez que llegue un viernes santo, un día de Semana Santa o simplemente te apetezca comer más ligero pero sabroso, guarda esta lista y lánzate a explorar. Seguro terminas repitiendo alguno, porque cada lugar tiene algo especial que te hace querer volver. Y si quedaste con ganas de seguir descubriendo joyitas gastronómicas en CDMX, quédate por aquí. En el blog tenemos muchas más recomendaciones para cada antojo, cada temporada y cada rincón de la ciudad. ¡Lo bueno apenas comienza y el hambre de lugares increíbles no se acaba!
