6 restaurantes para comer en Cuaresma en la colonia Roma
Durante la temporada de Cuaresma, los menús se transforman y los sabores se reinventan. Para muchos, es el momento perfecto para explorar nuevas opciones sin carne, pero con todo el sabor del mundo. Y si hay un lugar en la CDMX donde esto se vive con intensidad y creatividad, es en la colonia Roma. Este barrio, conocido por su vibra bohemia, su arquitectura con historia y su increíble escena gastronómica, ofrece propuestas que van desde lo tradicional hasta lo experimental, con platillos que respetan la temporada… sin dejar de sorprender al paladar.
En este artículo te contamos cuáles son 6 restaurantes para comer en Cuaresma en la colonia Roma que definitivamente valen la pena. Ya sea que estés buscando un menú basado en pescados y mariscos, opciones vegetarianas que brillen por sí solas, o simplemente te antoje algo diferente, esta guía es para ti. Porque la Roma no solo se come, se vive… y en Cuaresma, se disfruta aún más. Así que prepárate para tomar nota, reservar mesa y dejarte llevar por una temporada que tiene mucho más que ayuno: tiene sabor, intención y mucha, mucha creatividad.
1. Zuzú Cocina de Campo
Zuzú Cocina de Campo es un restaurante que te transporta al corazón del campo mexicano sin salir de la ciudad. Ubicado en la colonia Roma, este espacio celebra los ingredientes de la tierra y el mar, con una propuesta que resalta durante la temporada de Cuaresma. Su cocina se basa en técnicas tradicionales, productos locales y una visión contemporánea que da como resultado platillos honestos, reconfortantes y llenos de sabor. Es el lugar perfecto para quienes buscan opciones sin carne, pero con mucha alma.
Es ideal para comidas, especialmente si te gusta comer con calma, disfrutando del ambiente y de la compañía. El espacio tiene una estética rústica y elegante, con detalles en madera, plantas por doquier y una iluminación cálida que lo hace sentir como un refugio en medio del bullicio de la ciudad. Por eso, se vuelve un gran plan para compartir con familias, ya que tanto adultos como niños pueden encontrar algo que les encante en el menú.
Durante la temporada de Cuaresma, Zuzú ofrece platos especiales que giran en torno a vegetales frescos, hongos, maíces criollos, quesos artesanales y, por supuesto, opciones del mar como truchas, pescados blancos y camarones. Todo preparado con un toque artesanal que se nota desde la presentación hasta el primer bocado. Platillos como las tostadas de ceviche de vegetales, el taco de hongos asados con alioli de ajo tatemado o el pescado a la leña con puré de elote son solo algunos ejemplos de su menú cuaresmal.
El rango de precio por persona va de los 350 a los 1,000 pesos mexicanos, una inversión justa por una experiencia que va mucho más allá del simple acto de comer. Un plus que enamora: Zuzú admite mascotas, así que puedes llevar a tu lomito y pasar una tarde deliciosa en su terraza. Este restaurante no solo cumple con las reglas de la temporada, sino que lo hace con creatividad, amor por lo local y un enorme respeto por los ingredientes. Comer aquí en Cuaresma es saborear lo esencial, lo que realmente importa. Y eso, pocas veces se encuentra.
2. Yoru Handroll & Sushi Bar
Si durante la Cuaresma buscas un lugar para comer delicioso sin romper las reglas de la temporada, Yoru Handroll & Sushi Bar es una joya que no puedes dejar pasar. Este restaurante, ubicado en la colonia Roma Norte, le rinde homenaje al sushi con una propuesta moderna, relajada y llena de sabores frescos. Aquí, los protagonistas son los ingredientes del mar: pescados, mariscos y vegetales presentados con precisión y un toque de sofisticación japonesa que enamora desde el primer bocado.
Es ideal para cenas, sobre todo si estás buscando un lugar con ambiente cool pero sin pretensiones, donde puedas relajarte después del trabajo o tener una velada especial. El diseño del lugar, minimalista pero elegante, lo hace perfecto para compartir con parejas, ya sea en la barra viendo cómo preparan los handrolls o en una mesa con sake de por medio. Todo está pensado para que disfrutes con calma, en un ambiente íntimo y moderno.
Durante Cuaresma, el menú de Yoru brilla por sí solo. Desde sus clásicos nigiris y sashimis, hasta handrolls rellenos de atún, salmón, anguila o vegetales tempurizados, cada plato es una muestra del respeto por la materia prima y la técnica culinaria. También puedes encontrar opciones más frescas como tartares, ceviches y entradas ligeras que cumplen perfectamente con las restricciones de la temporada. El rango de precio por persona va de los 500 a los 1,000 pesos mexicanos, dependiendo de cuántos rollitos se te antojen (porque uno no es suficiente).
Y si te preguntas si puedes llevar a tu lomito, la respuesta es sí: Yoru admite mascotas, así que no hay excusa para no salir a disfrutar. Este lugar es ideal para quienes quieren vivir una experiencia diferente durante la Cuaresma, sin dejar de consentirse con buena comida y un ambiente que lo tiene todo. Sin lugar a dudas, disfrutarás de un momento agradable.
3. Restaurante Fisher’s Roma-Condesa
Durante la Cuaresma, cuando muchos buscan alternativas al típico platillo con carne, Fisher’s Roma-Condesa se vuelve uno de los lugares más recomendables para disfrutar de una experiencia marina completa. Este restaurante, ubicado en la colonia Roma-Condesa, es reconocido por su especialidad en mariscos y pescados frescos, preparados con ese toque mexicano que mezcla sabor, frescura y picante con maestría. Es uno de esos spots que combinan ambiente relajado con una cocina que nunca falla, ideal para dejarse consentir durante esta temporada.
Es ideal para comidas, aunque también funciona muy bien para desayunos tardíos o cenas con antojo del mar. Ya sea para una comida familiar, una reunión con amigos, o incluso una cita informal con esa persona especial, Fisher’s ofrece un ambiente vibrante, con terraza al aire libre, espacios interiores cómodos y una atención al cliente que siempre suma puntos. La música, la decoración moderna y el menú amplio hacen que uno quiera quedarse largo rato, probar de todo y brindar con una cerveza bien fría o una michelada bien servida.
En temporada de Cuaresma, el menú brilla por su versatilidad. Hay opciones para todos los gustos y apetitos: ceviches clásicos y creativos, aguachiles de camarón y pulpo, tostadas de atún con salsas especiales, tacos de marlín, filetes de pescado a la parrilla, y un sinfín de combinaciones que te permiten respetar la tradición sin limitar tu antojo. La barra fría es una de las más completas de la ciudad, ideal para personalizar tu experiencia con ingredientes frescos. El rango de precio por persona va de los 400 a los 600 pesos mexicanos, aunque es fácil dejarse llevar por la carta y pedir más de lo planeado (créenos, no te vas a arrepentir).
Y sí, otra buena noticia: Fisher’s admite mascotas, lo cual lo convierte en una excelente opción si quieres disfrutar tu comida acompañado de tu perro en la terraza. Es de esos lugares que combinan sabor, ambiente y buena vibra, perfecto para vivir una Cuaresma sabrosa, sin complicaciones y con mucho estilo. Ideal para los que creen que seguir una tradición no tiene por qué ser aburrido.
4. Onomura Nigiri Room
Cuando se trata de disfrutar platillos del mar con elegancia y técnica impecable, Onomura Nigiri Room es una parada obligada. Este exclusivo restaurante se encuentra en la colonia Cibeles y ofrece una experiencia japonesa contemporánea, centrada en nigiris preparados al momento, cortes finos de pescado y una atmósfera íntima que lo hace único. En temporada de Cuaresma, este lugar se vuelve un verdadero santuario para quienes buscan opciones sin carne, sin sacrificar sofisticación ni sabor.
Es ideal para cenas, sobre todo si quieres sorprender a alguien especial o regalarte una experiencia gastronómica fuera de lo común. Su ambiente es elegante, minimalista y enfocado en resaltar el ritual del sushi con calma y atención al detalle. Por eso, es perfecto para parejas que buscan una cena distinta, delicada y con un enfoque en ingredientes de mar de altísima calidad.
Durante Cuaresma, Onomura brilla con su selección de nigiris de atún, hamachi, salmón, ebi, tako y muchas otras variedades frescas y finamente seleccionadas. También ofrecen sashimis, handrolls y platos calientes como sopas y tempuras vegetales. Todo se sirve con precisión milimétrica y una presentación impecable. El rango de precio por persona va de los 1,000 a 1,200 pesos mexicanos, ideal para quienes buscan una experiencia culinaria de alto nivel durante esta temporada.
En cuanto al ambiente, Onomura es más bien tranquilo y reservado. El lugar no admite mascotas, ya que su enfoque está en brindar una experiencia refinada y concentrada en el arte del sushi. Si tu idea de Cuaresma incluye platillos de mar cuidadosamente preparados, en un entorno íntimo y con una atención a los detalles que raya en lo ceremonial, este restaurante te va a fascinar. Es el lugar perfecto para quienes valoran la calidad por encima de la cantidad.
5. Restaurante Maíz Tinto
Si hay un restaurante que logra celebrar la tradición mexicana con una mirada contemporánea y responsable, ese es Maíz Tinto. Este restaurante, ubicado en la colonia Roma, es una joya gastronómica que en temporada de Cuaresma se convierte en un espacio ideal para explorar la cocina sin carne, sin perder el sabor ni la creatividad. Su cocina parte del maíz criollo —de ahí su nombre—, pero se extiende a un universo de ingredientes locales que van desde pescados y mariscos hasta vegetales de temporada, siempre tratados con respeto y técnica impecable.
Es ideal para comidas, sobre todo si tienes ganas de reconectar con la cocina mexicana desde un enfoque fresco, colorido y bien ejecutado. Su ambiente es relajado pero con mucha personalidad: las paredes están decoradas con arte mexicano, la vajilla es artesanal y el aroma que sale de su cocina te atrapa desde que entras. Es perfecto para compartir con familias, gracias a su menú diverso y apto para todas las edades, aunque también es un gran lugar para una tarde larga entre amigos o incluso para una comida de trabajo diferente y deliciosa.
Durante la Cuaresma, Maíz Tinto adapta su menú con opciones pensadas para quienes siguen esta tradición, sin caer en lo aburrido. Puedes encontrar platillos como ceviche de lentejas, tacos de pescado zarandeado, ensaladas con nopal asado, tamales de camarón con salsas frescas y una increíble variedad de vegetales preparados al grill o al comal. Todo está bien balanceado: sabor, presentación y textura. El rango de precio por persona va de los 310 a los 500 pesos mexicanos, con porciones generosas y un nivel de detalle que se nota en cada plato.
Y sí, aquí puedes venir con tu perrito: Maíz Tinto admite mascotas, lo que lo convierte en una excelente opción para disfrutar de una comida completa sin dejar a nadie fuera. En un barrio donde la oferta culinaria es enorme, este restaurante destaca por ofrecer una experiencia honesta, cercana y muy sabrosa. En Cuaresma, cuando se trata de encontrar opciones que nutran el cuerpo y el alma, Maíz Tinto cumple —y con creces.
6. Puerto Viejo Mariscos
Si eres amante de los sabores del mar, Puerto Viejo Mariscos es un imperdible, especialmente durante la temporada de Cuaresma. Este restaurante, ubicado en la colonia Roma, es conocido por su ambiente relajado y su cocina inspirada en las costas mexicanas, donde los pescados y mariscos son los protagonistas absolutos. En esta época, su menú se vuelve aún más relevante, con propuestas que respetan las tradiciones cuaresmales sin sacrificar sabor, creatividad ni esa sazón costeña que lo caracteriza.
Es ideal para comidas, sobre todo si estás buscando un lugar sabroso y casual para compartir una buena mesa. La decoración del lugar remite al ambiente de una palapa junto al mar, con colores cálidos, detalles náuticos y música que te transporta directo a la playa. Todo esto lo convierte en un espacio perfecto para convivir con amigos y pasar un rato agradable entre risas, mariscos frescos y buenos tragos.
Durante Cuaresma, Puerto Viejo despliega su experiencia con platillos como tacos de pescado capeado, ceviches frescos, camarones al ajillo, tostadas de atún y cocteles de mariscos al estilo clásico. También hay opciones a la parrilla y platos especiales que cambian según la temporada. La frescura del producto es evidente en cada bocado. El rango de precio por persona va de los 300 a los 400 pesos mexicanos, lo que lo hace accesible para disfrutar de una comida completa sin salirte del presupuesto.
Además, si tienes un perrito, estás de suerte: Puerto Viejo admite mascotas, por lo que puedes disfrutar tu comida acompañado de tu mejor amigo peludo en su área al aire libre. En Cuaresma, este spot combina todo lo que se busca: comida rica, ambiente casual y opciones que respetan la temporada sin perder el sabor de vacaciones. Dispone de un amplio menú con variadas opciones para compartir.
De la Cuaresma al antojo
La Cuaresma es una temporada que nos invita a hacer pausas, a comer con intención y a redescubrir el placer de los ingredientes más simples. Como pudiste ver, la colonia Roma está repleta de lugares que saben exactamente cómo hacerlo. Estos seis restaurantes demuestran que comer sin carne no tiene por qué ser sinónimo de aburrimiento. Al contrario: se trata de explorar nuevos sabores, texturas y recetas que respetan la tradición, pero que no se olvidan de sorprender. Desde sushi minimalista hasta mariscos con sazón de playa y cocina mexicana de autor, hay un universo por probar.
Y si estos seis lugares ya despertaron tu antojo, espera a ver lo que sigue. En nuestro blog encontrarás más guías para sacarle el jugo a cada temporada, con recomendaciones de brunch, cenas románticas, spots pet-friendly, lugares con terraza y joyitas escondidas que vale la pena descubrir. Porque comer rico también es una forma de celebrar, y la ciudad —afortunadamente— tiene mucho qué ofrecer. Síguenos y mantén tu agenda llena de sabores, experiencias y rincones deliciosos. Lo mejor de la Roma (y de otras colonias igual de sabrosas) está por venir.
