8 restaurantes para ver el Mundial de Clubes en Cuauhtémoc
La colonia Cuauhtémoc es una de esas zonas donde todo pasa: oficinas, cultura, gastronomía y, por supuesto, mucho fútbol. Y con el Mundial de Clubes a la vuelta de la esquina, no hay mejor pretexto para salir, reunirte con tu gente y vivir cada partido como se debe: con buena comida, tragos servidos al momento y pantallas en puntos estratégicos. Aquí no importa si eres de los que gritan cada gol o de los que van más por el ambiente que por el marcador, porque hay restaurantes para todos los estilos. Desde lugares con sazón de mar, cortes de carne que hacen pausa en cada bocado y cantinas modernas que saben poner el mood, Cuauhtémoc se pone la camiseta y te ofrece una experiencia completa.
En esta guía reunimos ocho restaurantes donde puedes ver el torneo y disfrutarlo como nunca. Algunos tienen terrazas con vista urbana, otros barras para estar de pie con cerveza en mano, y todos comparten lo mismo: un ambiente que vibra con cada jugada. Si estás buscando dónde ver los partidos sin caer en el típico sports bar, quédate por aquí. Porque en esta zona, el fútbol también se juega en la mesa… y con mucho estilo. Y lo mejor es que no importa si es fase de grupos o la final, siempre hay un lugar ideal para vivirlo como se debe.
1. Fisher’s Roma-Condesa
Si estás buscando un lugar para ver el Mundial de Clubes mientras te echas unos mariscos bien servidos, Fisher’s Roma-Condesa es de esos restaurantes que siempre cumplen. Con un ambiente relajado, amplio y lleno de vida, este spot combina lo mejor del sabor del mar con un espacio pensado para pasarla bien. Las pantallas están ubicadas de forma estratégica para que puedas seguir el partido sin importar en qué mesa estés. Es el tipo de lugar donde puedes armar plan con amigos o familia y disfrutar el juego sin sacrificar el antojo de una buena comida. Además, su ambiente animado hace que incluso los partidos más tensos se sientan como parte de la fiesta.
Perfecto para una comida o cena en grupo, Fisher’s ofrece un menú extenso: ceviches, tostadas, tacos de camarón, caldos, pastas con mariscos, pescados al gusto y cócteles frescos que entran mejor que cualquier gol. Además, la variedad de bebidas es un plus: desde micheladas y clamatos, hasta tragos más elaborados si quieres celebrar en grande. El ambiente es relajado, pero con energía, ideal para disfrutar el torneo sin caer en lo típico.
El precio por persona va de $400 a $600 pesos mexicanos, una buena relación calidad-precio si consideras el tamaño de los platillos y la experiencia completa. El lugar también es apto para ir con familia, ya que tiene mesas amplias, buen servicio y una carta que se adapta a todos los gustos. La atención es rápida, los meseros conocen bien el menú y están pendientes de cada detalle para que no te pierdas nada del partido. Aquí no solo se come bien, también se vive el fútbol con ese toque fresco que solo un restaurante de mar puede dar.
Aunque no admite mascotas, Fisher’s Roma-Condesa se mantiene como una de las mejores opciones para vivir el torneo entre botanas de mar, buena compañía y goles que se gritan con el sabor de un aguachile picante. Es un lugar que cumple en todos los frentes: servicio, ambiente, comida y emoción futbolera. Aquí los partidos se disfrutan sin prisas, con chela en mano, platillo al centro y la certeza de que cada visita se convierte en un plan redondo. Desde el primer silbatazo hasta el último minuto, el restaurante mantiene ese ritmo vibrante que te hace querer quedarte para el siguiente partido. El ambiente es tan sabroso como su menú, y eso se nota en cada rincón.
2. Restaurante Carajillo Roma
Si vas a ver el Mundial de Clubes con el mismo nivel de exigencia con el que eliges tus restaurantes, Carajillo Roma es justo el lugar para ti. Ubicado en una de las zonas más trendy de la ciudad, este restaurante es sinónimo de sabor, diseño y una experiencia gastronómica que se siente completa desde la entrada. Aquí el fútbol se vive con clase: pantallas bien distribuidas, sonido ambiental que acompaña sin estorbar y un menú que transforma cualquier partido en toda una ocasión especial. En este espacio, cada gol se celebra con un trago bien servido y un platillo digno de foto.
Ideal para una cena con amigos, una salida en pareja o incluso un after en plan gourmet, Carajillo Roma ofrece una carta que juega en las grandes ligas: tacos de short rib, burrata con aceite de trufa, carpaccios, cortes jugosos y postres que son la estrella. Además, su mixología es de lo mejor en la zona, con carajillos de sabores especiales, cocteles artesanales y vinos bien seleccionados. Cada detalle está pensado para ofrecer una experiencia redonda: desde el servicio, hasta la presentación de los platos y bebidas.
El rango de precio por persona va de $800 a $1000 pesos mexicanos, lo cual se justifica por el nivel de cocina, atención y ambiente que ofrece el lugar. A pesar de su estilo elegante, el espacio se siente relajado y cómodo, ideal para ver partidos sin sacrificar estilo ni buena comida. El staff está bien capacitado, conoce los platillos y bebidas al detalle, y se asegura de que tengas todo lo necesario para disfrutar del torneo sin interrupciones. No es un lugar para gritar los goles a todo pulmón, pero sí para disfrutarlos con un brindis bien merecido.
El restaurante no admite mascotas, pero eso no impide que sea una excelente opción para disfrutar el torneo con todo el estilo que caracteriza a la Roma. Aquí el fútbol no es solo un evento, es una experiencia bien servida, acompañada de comida espectacular y un ambiente que hace que cada minuto valga la pena. Carajillo Roma es ideal para quienes aman combinar el deporte con la buena vida, donde cada partido se convierte en la excusa perfecta para comer bien, brindar mejor y cerrar la jornada con una sonrisa. Un spot que definitivamente juega en otra liga.
3. Prime Steak Club Reforma
Si vas a disfrutar del Mundial de Clubes como se merece, con cortes de carne premium, servicio impecable y un ambiente de lujo, Prime Steak Club Reforma es el lugar. Este restaurante eleva el nivel de cualquier plan con una propuesta que combina elegancia y pasión por el buen comer. Las pantallas están ubicadas estratégicamente para que no te pierdas ni una jugada, y el sonido ambiental te acompaña sin romper la atmósfera sofisticada. Aquí cada partido se vive con clase, entre copas de vino y platillos que parecen obra de arte.
Ideal para una comida formal entre amigos o una cena con pareja, el menú ofrece cortes dry aged, entradas como el tartar de res, pastas finas y una selección de mariscos que también destaca. La mixología no se queda atrás, con cocteles bien balanceados y una carta de vinos que complementa a la perfección la experiencia. Ver un partido en este entorno es más que seguir el marcador: es disfrutar cada momento en un espacio donde todo está pensado al detalle. Cada platillo llega al punto, cada bebida al tiempo justo.
El rango de precio por persona va de $900 a $1300 pesos mexicanos, reflejo de la calidad de ingredientes y del nivel del lugar. Es una opción para quienes buscan ver el fútbol en un entorno exclusivo sin caer en excesos. La atención es personalizada, con meseros que explican cortes, recomiendan maridajes y se aseguran de que la experiencia fluya desde el primer minuto del partido. Aunque es un restaurante de perfil más serio, el ambiente durante los encuentros mantiene una energía discreta pero presente, ideal para quienes disfrutan el deporte sin ruido excesivo.
El restaurante no admite mascotas, pero lo compensa con una experiencia que roza lo impecable en cada visita. Prime Steak Club Reforma es perfecto para quienes quieren ver los partidos con elegancia, sin sacrificar ambiente ni pasión por el fútbol. Aquí cada gol se brinda con vino de etiqueta, cada jugada se comenta con cortes de primera y cada visita deja ganas de repetir. Es un lugar donde el fútbol se transforma en una excusa para reunirte, compartir una mesa de alto nivel y vivir el deporte en su versión más refinada. La atención al detalle se refleja tanto en el servicio como en la atmósfera, siempre cuidada y sin estridencias.
4. Sal e Brasa Reforma
Si vas a ver el Mundial de Clubes con hambre de goles y de buena carne, Sal e Brasa Reforma es un lugar que te lo da todo al estilo brasileño. Este restaurante ofrece el famoso sistema de rodizio, donde los meseros pasan constantemente con cortes recién salidos del asador directo a tu mesa. Ubicado sobre Paseo de la Reforma, su ambiente amplio y cómodo lo hace ideal para seguir cada partido con ritmo, comida abundante y un toque internacional. Las pantallas bien distribuidas permiten disfrutar el juego sin perder detalle de la experiencia gastronómica.
Perfecto para una comida entre amigos, un domingo familiar o incluso para una comida de negocios con sabor, el lugar ofrece una barra de ensaladas, guarniciones calientes y una variedad de carnes que parece no terminar. Desde picanha, costilla y chorizo brasileño, hasta pollo marinado y cortes jugosos, aquí nadie se queda con hambre. Además, ofrecen bebidas típicas como la caipirinha, cervezas importadas y cocteles que acompañan perfecto cada jugada. El ritmo del servicio se adapta bien al del partido: constante, sabroso y sin interrupciones.
El rango de precio por persona ronda los $600 a $800 pesos mexicanos, más que justo por todo lo que incluye. El lugar está diseñado para compartir, comer sin prisas y disfrutar tanto de la comida como del ambiente. La atención es amable y el concepto de todo al centro lo hace ideal para seguir el torneo como si estuvieras en una fiesta continua. La decoración, con toques tropicales y mesas amplias, invita a quedarse más allá del último silbatazo. Aquí el fútbol se siente, pero también se saborea a lo grande.
Aunque no admite mascotas, Sal e Brasa Reforma ofrece una experiencia completa para los que quieren ver el torneo rodeados de buena carne, servicio continuo y ambiente relajado. No necesitas ser fan del fútbol para disfrutar, pero si lo eres, cada gol se celebra con un nuevo corte sobre tu plato. Es de esos lugares donde la comida no para y el ambiente futbolero está siempre encendido. Si buscas una opción distinta, contundente y sabrosa para vivir el Mundial, este rodizio te va a dejar más que satisfecho. Aquí, el partido es solo la mitad del plan.
5. Restaurante Santana Condesa
Cuando se trata de combinar buen ambiente, cocina mexicana con twist contemporáneo y una pantalla siempre encendida para ver el Mundial de Clubes, Santana Condesa sabe jugar en todas las posiciones. Este restaurante, ubicado en una de las esquinas más movidas de la colonia, tiene una vibra relajada que te atrapa desde el primer minuto. Música, decoración colorida, platillos que se antojan con solo verlos pasar y un ambiente que se siente fresco y urbano. Las pantallas están bien ubicadas y el sonido es lo suficientemente claro para seguir el partido sin perder el flow del lugar.
Es ideal para una comida con amigos o un plan de pareja con buena onda. El menú es una reinterpretación sabrosa de antojitos clásicos: esquites con tuétano, tacos dorados con rellenos inesperados, quesabirrias, tostadas crujientes y entradas para compartir. Los platos llegan rápido, bien servidos y con presentación cuidada, mientras la barra saca cocteles originales como margaritas infusionadas, tragos con mezcal y opciones más frutales. Santana no es solo para ir a comer, es para pasarla bien, y durante el torneo el ambiente se intensifica con promociones y buena vibra.
El precio por persona va de $400 a $700 pesos mexicanos, un rango cómodo para comer rico, beber bien y quedarte más de un partido si el plan lo permite. El lugar tiene una estructura abierta que permite moverse con libertad, ya sea en barra, en terraza o en salón. El servicio es rápido y buena onda, con meseros que te recomiendan tanto el trago ideal como el mejor ángulo para ver la pantalla. Santana tiene ese algo que te hace volver: tal vez es la música, tal vez los tacos, o tal vez la manera en la que cada visita se convierte en un plan redondo.
Aunque el restaurante no admite mascotas, eso no le resta puntos cuando se trata de pasar una tarde mundialista con sabor, ambiente y actitud. Aquí cada partido se acompaña con buena comida, amigos echando relajo y cocteles que fluyen mejor que un contraataque bien armado. Es de esos lugares donde el fútbol es parte de la experiencia, pero no la única. El ritmo es constante: platillos que llegan sin demora, tragos que sorprenden y un ambiente que se va encendiendo a medida que avanza el marcador. Si buscas un lugar para vivir el torneo sin caer en lo típico, donde la decoración, la atención y la cocina se combinan como un equipo bien alineado, este es el indicado.
6. Cantina Colonial CDMX
Si quieres ver el Mundial de Clubes en un ambiente que combine lo clásico con lo cool, Cantina Colonial CDMX es de esas joyas que sorprenden. Este lugar toma lo mejor de las cantinas tradicionales —comida para compartir, buen mezcal, servicio atento— y lo adapta al estilo relajado y moderno que se busca hoy. Ubicada en una zona céntrica de la colonia Cuauhtémoc, es perfecta para ir con amigos, empezar desde la comida y quedarse hasta que cae el último gol del día. El ambiente se va armando con el partido, y aquí nadie se queda fuera de la jugada.
Es ideal para una salida con familia o una reunión informal con amigos. El menú ofrece opciones clásicas con giro moderno: tacos, tostadas, cortes, calditos, y platos para compartir al centro, como si estuvieras en casa pero con mejor sazón. La coctelería se especializa en mezcales, tequilas y tragos de autor que acompañan bien cualquier platillo. Durante los partidos, el ambiente sube de nivel con promos, música y pantallas bien ubicadas. No es un sports bar, es una cantina con carácter, ideal para vibrar con cada jugada sin perder el sabor de la experiencia.
El precio por persona va de $400 a $650 pesos mexicanos, bastante accesible para el tipo de comida, atención y concepto. La decoración mezcla elementos vintage con detalles contemporáneos, logrando un espacio que se siente auténtico y cómodo. El personal es atento, conoce bien la carta y está pendiente sin ser invasivo. En días de partido, el ambiente es festivo sin ser caótico: aquí se vive el fútbol, pero también se respeta la sobremesa y las buenas charlas. Si te gusta ver los partidos rodeado de buena comida y una vibra más tradicional con estilo, esta cantina es el lugar.
Aunque no admite mascotas, Cantina Colonial CDMX ofrece una experiencia tan bien armada que ni falta hacen. Es de esos lugares donde el plan fluye solo: llegas por un partido y terminas quedándote mucho más. El sabor casero, el ambiente relajado y la atención constante hacen que cada visita se sienta especial. Aquí los goles se gritan entre tragos, los brindis fluyen y la sobremesa se alarga. Si estás buscando un spot que tenga personalidad, tradición y el ambiente perfecto para vivir el torneo sin caer en lo típico, este lugar lo tiene todo. Porque en esta cantina, el fútbol se juega con alma.
7. La Pescadería Condesa
Si lo tuyo es ver el Mundial de Clubes con sabor a mar, chela en mano y un ambiente que parece sacado de la costa, La Pescadería Condesa es el spot ideal. Este restaurante se siente como una escapada al Pacífico en medio de la ciudad: paredes coloridas, menú fresco y un ambiente desenfadado que se vuelve aún mejor cuando hay fútbol. Las pantallas están bien ubicadas, la música acompaña sin estorbar y el servicio tiene ese ritmo playero que te hace olvidarte del reloj. Aquí, cada gol se grita entre tostadas, ceviches y rondas de camarones.
Es perfecto para una comida con amigos o una tarde larga de familia compartiendo platillos. El menú está lleno de clásicos del mar: tacos de pescado, aguachiles, ceviches, tostadas de atún, cocteles y más. Todo llega fresco, bien servido y a buen ritmo, acompañado de cervezas frías o cocteles frutales como mojitos, margaritas y micheladas. Durante los partidos, se arman promociones que hacen más fácil quedarse hasta el final del segundo tiempo. Es de esos lugares donde el ambiente se prende solo con el partido y un par de rondas más.
El precio por persona ronda los $400 a $650 pesos mexicanos, bastante accesible si consideras la frescura de los ingredientes y el ambiente que ofrece el lugar. Su terraza semiabierta, el mobiliario de madera y los colores vivos crean un espacio muy agradable para comer bien sin complicaciones. Los meseros son atentos y el servicio va al ritmo que necesitas: relajado, pero eficiente. Puedes llegar sin mucha expectativa y salir con ganas de regresar antes del próximo partido. Si buscas un lugar donde el fútbol se sienta en modo vacaciones, este es para ti.
Aunque no admite mascotas, La Pescadería Condesa te hace sentir tan a gusto que poco importa. Aquí, el Mundial se vive entre sabores del mar, tragos frescos y la vibra ligera de un día de playa urbana. Es un espacio que invita a relajarse, a comer sin prisas y a disfrutar el partido con la energía de quien sabe que lo importante es pasarla bien. Si tu idea de ver fútbol es con los pies (casi) en la arena y el plato lleno de ceviche, este restaurante va a convertirse en uno de tus favoritos para el torneo. Aquí el gol se grita con limón y sal.
8. Federico’s Cabrería Grill & Pizza Reforma
Si quieres ver el Mundial de Clubes con el mejor pretexto para combinar pizzas artesanales, cortes al grill y una buena cerveza, Federico’s Cabrería Reforma es ese lugar donde todo suena como gol. Este restaurante ofrece un ambiente relajado pero con mucha onda, ideal para seguir el torneo con amigos, pareja o familia. Las pantallas están colocadas en los puntos clave, lo que garantiza que veas cada jugada sin importar dónde te sientes. La decoración es moderna, con toques industriales que le dan ese look fresco que se siente tanto de día como de noche.
Es ideal para una comida entre cuates, o para armar un plan de pareja sin caer en lo tradicional. El menú se divide entre parrilla y horno de piedra: desde cortes jugosos hasta pizzas con combinaciones originales que van del pepperoni clásico a opciones con ingredientes gourmet. También hay ensaladas, pastas y entradas para compartir, así que nadie se queda sin antojo. Las bebidas incluyen cervezas nacionales e importadas, coctelería básica bien ejecutada y vinos por copa. Durante los partidos, hay promos que invitan a alargar el plan hasta el silbatazo final.
El precio por persona va de $450 a $700 pesos mexicanos, razonable por la calidad, la ubicación sobre Reforma y la atención. El ambiente es cómodo y versátil: igual puedes ir vestido casual o con tu camiseta del equipo, y te vas a sentir bien recibido. El servicio es rápido, con meseros que conocen el menú y te orientan si quieres maridar tu corte con una buena etiqueta o acompañar tu pizza con algo más que chela. El ritmo del restaurante se adapta al del partido: no es caótico ni frío, tiene ese punto exacto de buena vibra.
Aunque el restaurante no admite mascotas, Federico’s Cabrería Grill & Pizza Reforma tiene todo para que el fútbol se vuelva sinónimo de sabor y comodidad. Aquí no solo se ve el partido, se vive entre mordidas y tragos bien servidos, con ese ambiente que no presiona pero invita a quedarte. Es el tipo de lugar que se siente como el equilibrio perfecto entre ver fútbol con emoción y comer con gusto. Si lo tuyo es gritar goles entre bocados de pizza artesanal o un buen corte al punto, este es tu spot. Aquí, cada jugada es una razón más para brindar.
Goles, brindis y sobremesa
La colonia Cuauhtémoc no solo es punto clave de la CDMX por su ubicación, sino por su capacidad de ofrecer experiencias únicas para todos los gustos, incluyendo a los amantes del fútbol. Desde terrazas relajadas y cantinas con alma, hasta restaurantes con cocina internacional, brasas, mariscos y pizzas artesanales, esta zona demuestra que el Mundial de Clubes también se juega en la mesa. Aquí no se trata solo de ver el partido, sino de hacerlo con sazón, en buena compañía y con la seguridad de que cada gol será tan memorable como el platillo que tienes frente a ti. Si lo tuyo es celebrar cada jugada con un brindis, compartir al centro y quedarte hasta el último minuto, Cuauhtémoc tiene un lugar esperándote.
Y si ya tienes tu favorito, ¿por qué no descubrir más? En nuestro blog seguimos recorriendo las colonias de la CDMX para recomendarte los mejores lugares donde el fútbol, la comida y el ambiente se mezclan a la perfección. No importa si eres aficionado o solo vas por el plan, lo importante es saber dónde se vive bien cada jornada. Sigue leyendo y acompáñanos a explorar los rincones donde se grita ¡gol! con sabor.
