5 restaurantes para ver el Mundial de Clubes en la colonia Nápoles

Para los que disfrutan el fútbol con una buena carne asada, Fonda Argentina Nápoles es el lugar donde el sabor y la pasión por el deporte se encuentran. En plena colonia Nápoles, este restaurante ofrece una experiencia cálida y tradicional, ideal para ver los partidos del Mundial de Clubes mientras se disfruta de un ambiente relajado. Con su toque rústico y atención cercana, es ese tipo de lugar donde te sientes como en casa desde el primer minuto. Aquí los partidos se viven sin prisas, entre un corte al punto y una cerveza bien fría.

Es perfecto para una comida en familia, con amigos que se arman la reta para ver el partido, o incluso para una cita sin pretensiones pero con mucho sabor. Su menú destaca por los clásicos argentinos: empanadas, ensaladas frescas, provoletas y, por supuesto, cortes al carbón como el bife de chorizo o el vacío. Cuentan con varias pantallas bien ubicadas para seguir el juego desde cualquier rincón, lo cual suma puntos cuando se trata de no perderte ni un solo gol. La calidez del lugar y el ambiente relajado hacen que cada partido se sienta especial.

El rango de precio por persona está entre $310 y $500 pesos mexicanos, y ofrece una excelente relación calidad-precio. La comida es abundante, los cortes están en su punto y el servicio siempre atento. Aunque el espacio es familiar, el ambiente se pone buenísimo durante los partidos, con mesas que se llenan de emoción y brindis que celebran cada anotación. Además, cuentan con una buena carta de vinos y cervezas artesanales que complementan a la perfección cualquier platillo. Fonda Argentina no solo es comida, es una experiencia de sabor y fútbol en un mismo lugar.

El restaurante no admite mascotas, pero eso no le quita puntos cuando se trata de ser uno de los spots más cálidos para ver el torneo. Si estás buscando un lugar sin pretensiones, con sabor auténtico, atención amable y pantallas para disfrutar el Mundial de Clubes, aquí lo vas a encontrar. Fonda Argentina Nápoles combina tradición, buena carne y emoción futbolera en un mismo paquete. Las mesas amplias, el servicio sin prisas y el ambiente familiar lo hacen ideal para pasar horas viendo partidos sin sentirte presionado a irte. Además, su cocina constante garantiza que el sabor se mantenga igual de bueno desde el primer platillo hasta el último trago.