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10 restaurantes para comer barato en CDMX

Comer rico sin vaciar la cartera no solo es posible en la Ciudad de México, ¡es casi un deporte nacional! Esta ciudad vibrante y siempre despierta está repleta de joyitas culinarias donde el sabor compite con los precios bajos. Desde fonditas escondidas en calles secundarias hasta changarros con décadas de historia y fama ganada a pulso, la CDMX tiene opciones para todos los que buscan comida buena, bonita y barata. ¿Tacos que parecen obra de arte por menos de $50? ¿Menús corridos con sazón casero que te apapachan el alma? Aquí los hay, y más.

Restaurantes para comer barato CDMX

En esta guía te llevamos por un recorrido delicioso por los 10 restaurantes para comer barato en CDMX. Lugares donde con un billete de $100 puedes salir rodando de lo satisfecho, y que además tienen ese “algo” que los hace especiales: ambiente relajado, atención de primera o simplemente ese sazón que solo se logra con años de experiencia. Prepárate para descubrir rincones que te harán decir “¿cómo no lo conocía antes?” y anotar mentalmente tus próximos destinos foodie sin culpa en la cartera.

1. Restaurante Maratea Coyoacán

5/5

Ubicado en la tradicional colonia Del Carmen, Maratea Coyoacán es una joya escondida para quienes buscan comer bien y barato en un ambiente encantador. Con una propuesta gastronómica de inspiración italiana, este restaurante ofrece platillos con ingredientes frescos y sazón auténtico, sin que tu cartera sufra las consecuencias. Desde el primer bocado, se nota el cuidado en cada preparación: pastas suaves, pizzas con masa crujiente y salsas caseras que evocan el sabor de una cocina hecha con cariño. Lo mejor es que todo esto llega a tu mesa sin precios excesivos, haciendo de Maratea una opción ideal para quienes buscan sabor, calidad y un respiro del gasto.

Ideal para una rica comida con familias o un plan relajado con amigos, Maratea combina lo mejor del comfort food con un entorno relajado y cálido. Las pastas, las pizzas al horno y sus entradas estilo mediterráneo son perfectas para compartir sin gastar de más. Además, las porciones son generosas, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes buscan saciar el hambre sin vaciar el bolsillo.

Con un rango de precio entre $150 y $450 pesos mexicanos por persona, es un spot que se agradece en una ciudad donde los precios tienden a elevarse sin justificación. Aquí, la calidad no está peleada con el ahorro. Puedes armarte una comida completa con entrada, plato fuerte y bebida sin salirte del presupuesto. Un verdadero hallazgo para los que valoran lo bueno, bonito y barato.

Aunque Maratea Coyoacán no admite mascotas, su ambiente es tan ameno que ni falta hacen. Con su atmósfera acogedora, excelente servicio y una carta que consiente al paladar sin castigar la cartera, se convierte en una parada obligada para los foodies que saben que comer barato también puede ser sinónimo de comer delicioso.

2. Restaurante 50 Friends Oasis Coyoacán

5/5

En el animado centro comercial Oasis, en la colonia Romero de Terreros, se encuentra 50 Friends Oasis Coyoacán, una opción imperdible para quienes buscan comer barato sin sacrificar sabor ni calidad. Aunque su ambientación es moderna y elegante, lo mejor de este restaurante está en su menú: pizzas al horno de leña, pastas cremosas, ensaladas frescas y antipastos que saben a auténtica tradición italiana. Todo esto, a precios accesibles que sorprenden para su zona.

Este restaurante es ideal para una comida casual con familias, una tarde relajada entre amigos o incluso una cita espontánea. La variedad de su menú permite compartir platillos, pedir entradas para el centro y armar una experiencia sabrosa sin gastar de más. Aquí se puede comer bien con menos de lo que se imagina, lo que lo convierte en un favorito para los que saben encontrar calidad sin pagar de más.

Con un rango de precio de $350 a $450 pesos mexicanos por persona, es posible disfrutar desde una entrada, un plato fuerte y una bebida sin rebasar el presupuesto. Las promociones y menús para compartir ayudan a estirar aún más el bolsillo, y los sabores —como el de su pizza Sorrento o la lasaña al horno— hacen que cada visita valga la pena.

Además, 50 Friends Oasis Coyoacán admite mascotas, lo cual lo convierte en una excelente opción si no quieres dejar en casa a tu lomito. Con un ambiente acogedor, servicio atento y una cocina que cumple con creces, este lugar demuestra que sí se puede comer rico, italiano y económico en el sur de la CDMX. Ideal para repetir sin culpa, ni en el paladar ni en el gasto.

3. Restaurante Sono Rooftop CDMX

5/5

En lo alto de un edificio de la colonia Nápoles, se encuentra Sono Rooftop, un restaurante que combina buena comida, cocteles creativos y una vista privilegiada de la ciudad. Pero lo que realmente sorprende es que, a pesar de su estilo moderno y ambiente cosmopolita, es posible comer bien sin gastar de más. Su menú incluye desde entradas para compartir hasta cortes y mariscos que ofrecen una excelente relación calidad-precio.

Este lugar es ideal para una cena con amigos o una salida informal con parejas. Con una atmósfera relajada y música que va del disco al house, se presta para tardes largas y noches memorables. Y si lo tuyo es botanear, hay opciones deliciosas como tacos de riyeye con tuétano o picaña a precios accesibles para tratarte sin culpa. Este restaurante dispone de gran variedad de sabores a precios muy baratos.

El rango de precio va desde $100 hasta $700 pesos mexicanos por persona, lo que te da la libertad de ajustar tu experiencia según el antojo y el bolsillo. Puedes ir por una bebida y un snack sin gastar mucho, o darte un gusto con una comida completa que aún así no se siente pesada en la cartera. El lugar también cuenta con áreas privadas sin costo adicional, lo que lo hace ideal para reuniones sin complicaciones.

Además, Sono Rooftop admite mascotas, así que tu amigo peludo también es bienvenido. Este detalle, junto con su ambiente relajado y precios versátiles, convierte a Sono en una opción ideal para quienes quieren disfrutar de una comida con estilo sin caer en excesos. Comer barato con vista al cielo de la CDMX nunca había sido tan fácil (ni tan cool).

4. Restaurante Matsuba Polanco

5/5

En la exclusiva colonia Polanco, conocida por sus spots de lujo, también se pueden encontrar opciones que sorprenden por su calidad y precios accesibles. Un claro ejemplo es Restaurante Matsuba, un lugar que honra la cocina japonesa con técnicas refinadas, pero que ofrece alternativas para quienes quieren comer delicioso sin vaciar la cartera. Desde su barra Edomae hasta sus platos a la carta, este sitio combina sabor, presentación y valor en cada platillo.

Ideal para una cena especial con parejas o una comida distinta entre amigos, Matsuba ofrece una experiencia que va más allá del sushi tradicional. Aquí puedes encontrar nigiris elaborados con pescados madurados en casa, ramen con fondos complejos y opciones como el steak de wagyu o el toast de uni que, aunque suenan sofisticados, están disponibles a precios más accesibles de lo que imaginas.

El rango de precio va de $85 a $900 pesos mexicanos por persona, pero lo mejor es que hay opciones que permiten disfrutar del menú sin rebasar los $300 pesos. Puedes armar una experiencia completa con una entrada ligera y un plato principal sin gastar como en un restaurante de alta gama. Además, el ambiente íntimo y elegante le da un plus a cada visita.

Eso sí, Restaurante Matsuba no admite mascotas, así que si planeas una salida con tu lomito, mejor deja esa para otra ocasión. Pero si lo tuyo es el buen comer, el detalle en la preparación y una experiencia japonesa diferente, este lugar es una excelente elección. En una zona donde lo exclusivo suele ser sinónimo de caro, Matsuba demuestra que comer bien y barato es totalmente posible.

5. Restaurante Nonna Condesa

5/5

En la siempre viva y camaleónica colonia Condesa, Restaurante Nonna destaca como una opción deliciosa y accesible para quienes buscan el sabor de Italia sin desembolsar una fortuna. Con un ambiente que mezcla lo rústico y lo moderno, este lugar logra ese balance perfecto entre lo acogedor y lo sofisticado. Desde su fachada sobre la Avenida Ámsterdam hasta el último bocado, Nonna deja claro que se puede comer rico y barato sin salir del circuito foodie de la ciudad.

Ideal para una cena relajada con parejas o una salida con amigos, Nonna tiene un menú que enamora desde la primera leída. Pastas caseras, pizzas al horno de piedra, lasañas gratinadas y ensaladas frescas forman parte de su oferta. Y aunque la calidad de sus ingredientes es alta, los precios no lo son. Incluso puedes compartir platos sin que eso implique sacrificar cantidad ni sabor.

Con un rango de precio entre $200 y $700 pesos mexicanos por persona, es fácil armar una comida completa por un precio justo. Y si vas en pareja o grupo, la experiencia se vuelve aún más accesible al dividir y probar diferentes opciones. Además, los fines de semana suelen tener música en vivo, lo que hace del plan algo más completo y memorable sin gastar de más.

Otro punto a favor es que Restaurante Nonna admite mascotas, así que puedes disfrutar de una velada italiana con tu lomito a tu lado. Ya sea para una cita casual, una comida espontánea o simplemente para apapacharte con pasta sin remordimiento financiero, Nonna es una parada obligada para quienes creen que comer barato también puede ser una experiencia digna de repetirse.

6. Restaurante Kuh Cocina Suiza San Ángel

5/5

En una casona antigua de la colonia San Ángel, Restaurante Kuh Cocina Suiza logra lo que pocos: transportar a sus comensales a los Alpes suizos con platillos clásicos, ambiente cálido y precios que no espantan. Aunque se especializa en fondues y recetas europeas, este restaurante ofrece opciones asequibles para quienes quieren algo diferente, sabroso y sin romper el presupuesto. Perfecto para una comida fuera de lo común que no deje vacío el bolsillo.

Ideal para una cena acogedora con familias, una comida especial con amigos, o incluso para una cita entre parejas, Kuh combina tradición y sabor en un espacio íntimo y encantador. Su menú ofrece desde raclettes y rösti hasta fondues de queso y pizzas artesanales, todos preparados con ingredientes frescos y técnicas caseras que elevan el sabor sin elevar los precios.

Con un rango de precio entre $300 y $500 pesos mexicanos por persona, es posible disfrutar una experiencia completa —entrada, plato fuerte y bebida— a un costo razonable para el tipo de cocina que ofrece. Además, entre semana puedes aprovechar promociones como 2×1 en fondues y pizzas, lo que lo vuelve aún más atractivo para quienes buscan comer rico y barato en el sur de la ciudad.

Y sí, Kuh Cocina Suiza admite mascotas, por lo que no tienes que dejar en casa a tu amigo peludo mientras disfrutas de una comida reconfortante. Su terraza al aire libre y el servicio amable terminan de redondear una experiencia que combina sabor, comodidad y precios accesibles. Comer como en Suiza, pero pagando como en Coyoacán, es posible en este restaurante encantador de San Ángel.

7. Restaurante Yatai Japanese Street Food Coyoacán

5/5

En una esquina discreta de la colonia San Francisco Coyoacán, Yatai Japanese Street Food ofrece un pedazo auténtico de Japón a precios que sorprenden para bien. Inspirado en los puestos callejeros nipones, este pequeño restaurante apuesta por la cocina rápida, sabrosa y asequible. Su ambientación es sencilla pero acogedora, con detalles en madera, bancos altos y utensilios dispuestos al estilo izakaya. 

Ideal para una comida rápida o una cena relajada con amigos o parejas, Yatai se ha ganado su lugar gracias a sus clásicos como el ramen tonkotsu, takoyaki, gyozas y el okonomiyaki. Todo se prepara al momento y frente a tus ojos, lo que le da ese toque callejero pero cuidado que tanto se agradece. El sabor es honesto, potente y reconfortante; justo lo que uno espera de un local que honra la esencia de la comida japonesa callejera.

El rango de precio va de $259 a $300 pesos mexicanos por persona, lo que lo coloca como una de las mejores opciones para comer japonés sin gastar una fortuna. Puedes salir bien satisfecho con un bowl de ramen completo, una entrada y bebida incluida, sin sentir que te pasaste de tu presupuesto. Además, la relación precio-calidad es inmejorable: por lo que pagas, recibes porciones generosas, ingredientes auténticos y sazón de verdad. 

Eso sí, Yatai Japanese Street Food no admite mascotas, ya que el espacio es reducido y más bien tipo barra. Aun así, eso no impide que la experiencia sea altamente disfrutable. Aquí lo importante es la comida y su sabor directo, sin distracciones. Si estás en Coyoacán y se te antoja algo diferente, rápido y accesible, este rincón japonés cumple con creces. Comer barato y con sazón extranjero sí es posible, y este lugar lo demuestra en cada platillo. 

8. Restaurante Enrico Caruso Ristorante Coyoacán

5/5

En la encantadora colonia Parque San Andrés, Enrico Caruso Ristorante ofrece una experiencia italiana sin necesidad de gastar como en Roma. Este restaurante combina elegancia clásica con un ambiente relajado, ideal para quienes buscan una comida con sazón europeo pero con precios amigables. Su cocina se inspira en recetas tradicionales del sur de Italia, con ingredientes frescos y porciones generosas que hacen del lugar una excelente opción para comer bien sin pagar de más.

Es perfecto para una cena en compañía de familias, una salida tranquila con parejas o una reunión casual entre amigos. Su menú incluye desde pizzas al horno de piedra y pastas artesanales hasta risottos bien ejecutados y carnes en su punto. Además, hay opciones para compartir, lo cual hace que la cuenta no se dispare y todos se vayan felices y satisfechos. Aquí el lujo está en el sabor, no en la etiqueta del precio.

Con un rango de precio de $300 a $500 pesos mexicanos por persona, es posible disfrutar de una comida completa —entrada, plato fuerte y bebida— sin sentir remordimiento financiero. Lo mejor es que el ambiente y el servicio hacen que la experiencia se sienta de alto nivel, ideal para una cita o un plan especial sin que sea necesario vaciar la quincena.

Eso sí, Enrico Caruso Ristorante no admite mascotas, por lo que si planeas ir con tu lomito, este no es el lugar. Aun así, es un restaurante que entrega calidad, atención y una carta variada sin precios inflados. Comer barato, bien y en un entorno bonito no tiene por qué ser imposible, y Enrico Caruso lo demuestra con cada plato que sirve. Ideal para los que saben apreciar un buen festín sin arruinarse en el intento.

9. Restaurante Fiamma San Ángel

5/5

En la elegante colonia Tizapán San Ángel, Restaurante Fiamma ofrece una experiencia italiana que combina sabor, calidad y precios accesibles para su categoría. Aunque el lugar tiene un aire sofisticado, la buena noticia es que puedes disfrutar de su cocina sin gastar como en una trattoria de lujo. Su concepto de “grigliata” italiana —cocina al fuego— aporta autenticidad y sazón intensa a cada platillo, haciéndolo ideal para quienes valoran el buen comer sin derrochar.

Perfecto para una cena especial entre parejas, una comida larga con amigos, o incluso un plan familiar, Fiamma tiene opciones para todos los gustos. Desde sus pizzas al horno, pasando por la milanesa con pomodoro, hasta pastas cremosas y ensaladas frescas, el menú se adapta tanto al antojo como al presupuesto. Los ingredientes son de calidad, las porciones generosas y los sabores están diseñados para disfrutarse sin prisa, como se come en Italia.

Con un rango de precio entre $500 y $800 pesos mexicanos por persona, Fiamma puede parecer elevado a primera vista, pero con platos para compartir y promociones especiales, es posible comer bien por menos. Además, la experiencia lo vale: servicio atento, espacio amplio y ambiente agradable que te hace sentir como en una cena especial, pero sin la presión de una cuenta excesiva.

Eso sí, Restaurante Fiamma no admite mascotas, así que si planeabas un plan pet-friendly, tendrás que guardarlo para otra ocasión. Sin embargo, para quienes buscan un restaurante bonito, con excelente sazón y una relación calidad-precio justa, Fiamma es una opción confiable. Comer barato en San Ángel con toque gourmet sí es posible, y este lugar lo confirma con cada platillo servido a la parrilla.

10. Restaurante La Taberna del Chanclas Condesa

5/5

En plena colonia Hipódromo Condesa, donde los restaurantes abundan pero los precios no siempre son amigables, La Taberna del Chanclas rompe el molde con una propuesta de cocina española sabrosa, generosa y accesible. Este lugar logra reunir lo mejor de una típica taberna ibérica con un toque relajado y contemporáneo, ideal para quienes quieren disfrutar de platillos clásicos sin pagar precios turísticos.

Ideal para una cena con familias, una salida con amigos o una velada relajada entre parejas, su menú está repleto de recetas que invitan a compartir: croquetas de jamón, chorizo a la sidra, solomillo al gusto, tortillas jugosas y, por supuesto, paella. Las porciones son cumplidoras y los sabores tradicionales, lo que hace que cada platillo se disfrute de principio a fin sin sentir que pagaste de más.

Con un rango de precio que va de $500 a $1,000 pesos mexicanos por persona, La Taberna del Chanclas ofrece una experiencia de cocina española auténtica, donde el precio refleja calidad y cantidad. Lo mejor es que puedes pedir varios platillos al centro y compartir, lo cual reduce aún más el gasto por persona. Ideal para quienes quieren una comida completa y con sabor casero, sin que la cuenta se convierta en un problema.

Eso sí, La Taberna del Chanclas no admite mascotas, así que si buscas una experiencia pet-friendly, este no es el spot. Pero si tu objetivo es comer bien, en un lugar con ambiente festivo y precios razonables, este restaurante es una joya en la Condesa. Aquí el tapeo se convierte en una opción perfecta para disfrutar de una buena comida, brindar con vino y salir con la cartera feliz. Comer barato y bien nunca fue tan español.

El tour del buen comer no termina aquí

Explorar la CDMX a través de sus sabores más accesibles es como recorrer un mapa lleno de tesoros escondidos. Cada uno de estos restaurantes ofrece más que precios bajos: son puertas a cocinas auténticas, recetas con historia y sazones que conquistan sin necesidad de romper el cochinito. Comer barato en esta ciudad es una aventura que premia al curioso, al que se atreve a cruzar una calle más, preguntar por la especialidad de la casa o confiar en un menú que no necesita lujos para brillar.

Y si ya te dio hambre de seguir descubriendo, quédate con nosotros. En el blog de Reservándonos tenemos muchas más rutas para tu paladar: lugares secretos, spots nuevos, clásicos de barrio y propuestas que te harán querer reservar de inmediato. Porque la buena comida no siempre cuesta caro, pero sí merece una buena historia. ¡Sigue explorando con nosotros!

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