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7 restaurantes para comer barato en la Roma

La colonia Roma es uno de los barrios más vibrantes, caminables y sabrosos de la Ciudad de México. Con su mezcla de arquitectura porfiriana, cafés con encanto, galerías de arte y ambiente alternativo, es fácil pensar que todo aquí cuesta una fortuna. Pero no te dejes engañar: también hay opciones para comer delicioso sin que el ticket final te arruine el día. Entre calles arboladas y esquinas llenas de vida, se esconden restaurantes que combinan creatividad, sazón y precios justos. Comer barato en la Roma no solo es posible, es parte del encanto de explorarla a pie y con buen diente. Y lo mejor es que muchos de estos lugares tienen tanto sabor como estilo, sin que eso se refleje en la cuenta.

Restaurantes para comer barato Roma

En este recorrido te vamos a mostrar siete lugares que desafían el mito de que la Roma es solo para presupuestos altos. Desde cocina de autor en porciones accesibles hasta taquerías con historia y sabor, esta colonia tiene algo para cada tipo de antojo. Ya sea que estés de paseo, trabajes por la zona o seas vecino habitual, estas recomendaciones te ayudarán a comer sabroso sin vaciar la cartera. Sigue leyendo y descubre que lo mejor de la Roma no siempre está en los reflectores… a veces está en el menú, a precio justo y con mucho corazón.

1. Restaurante 3 Tonalá

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, justo en una de las esquinas más caminables y vibrantes de la ciudad. Restaurante 3 Tonalá tiene ese estilo relajado que tanto caracteriza a la zona, con mesas al aire libre y una decoración sencilla pero con onda. Aquí lo importante es el sabor: platillos bien hechos, con ingredientes frescos y una sazón que no decepciona. Aunque su ubicación es privilegiada, los precios se mantienen accesibles. Es uno de esos lugares donde se come bien, sin poses y sin gastar de más. Incluso es común encontrar eventos culturales o noches temáticas que hacen la experiencia más especial. Una joya de barrio para los que saben buscar.

Es ideal para comida, especialmente si estás explorando la Roma y necesitas una pausa con sabor y sin prisas. Es ideal para amigos, por su ambiente casual, su menú ecléctico y sus mesas perfectas para compartir charlas y platillos. La carta cambia constantemente, pero siempre mantiene ese equilibrio entre lo sabroso y lo sencillo. Además, es pet-friendly, lo que lo vuelve aún más popular entre los locales. Comer aquí es una experiencia relajada, sin pretensiones y llena de buenas sorpresas. Un lugar perfecto para reconectar, comer sabroso y seguir disfrutando del barrio.

El rango de precio es de $200 a $350 pesos mexicanos por persona, lo cual es más que razonable para un restaurante ubicado en el corazón de la Roma. Puedes pedir desde una entrada y un plato fuerte hasta una bebida artesanal sin que la cuenta se vuelva una preocupación. También suelen tener menús del día que ofrecen opciones completas a precios muy amigables. Comer rico y con estilo no tiene por qué ser caro, y en 3 Tonalá eso queda claro desde el primer bocado. Calidad y accesibilidad, bien servidas en cada plato.

El restaurante admite mascotas, lo cual lo hace ideal para quienes pasean por la Roma con su perro y buscan un lugar tranquilo donde comer bien. Las mesas exteriores son perfectas para disfrutar del ambiente sin dejar a tu lomito en casa. Este detalle, junto con su propuesta gastronómica, lo convierte en uno de los favoritos del barrio. Aquí se puede disfrutar de una buena comida, con buen ambiente, buena compañía y sin necesidad de gastar una fortuna. Comer barato y con onda es posible, y este lugar es prueba clara de ello.

2. Restaurante Samudaay

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, en una calle tranquila que se presta para caminar y descubrir sabores poco comunes. Samudaay es una propuesta de cocina india moderna que sorprende tanto por su autenticidad como por sus precios accesibles. El espacio es cálido, con decoración sencilla y un ambiente que invita a relajarse. Su menú está lleno de especias, colores y combinaciones que te transportan directamente al sur de Asia. Es perfecto para quienes buscan algo distinto sin tener que gastar una fortuna. Comer barato también puede ser una aventura cultural.

Es ideal para comida, sobre todo si tienes ganas de algo con personalidad, sabores intensos y una experiencia fuera de lo habitual. Es ideal para parejas, gracias a su ambiente íntimo, buena música y platillos para compartir. El menú tiene desde entradas ligeras hasta curry sustanciosos, todos servidos con pan naan recién horneado. Es uno de esos lugares donde comer se convierte en un ritual. Perfecto para salir de la rutina y descubrir algo nuevo sin tener que salir de la Roma. Aquí, la comida cuenta historias, y cada platillo tiene algo que decir.

El rango de precio es de $180 a $300 pesos mexicanos por persona, ideal para quienes quieren algo diferente sin romper el presupuesto. Las porciones son generosas, y muchos platillos pueden compartirse, lo que ayuda a que la cuenta sea aún más amigable. También hay menús del día que te permiten probar varios sabores sin gastar de más. Comer comida internacional en la Roma sin pagar precios elevados es posible, y Samudaay es prueba de ello. Una opción sabrosa, bien servida y con mucha identidad. Aquí, el dinero alcanza para mucho más que solo saciar el hambre.

El restaurante admite mascotas, por lo que no tendrás que dejar a tu lomito fuera del plan. Hay mesas en exterior donde puedes sentarte a disfrutar con tranquilidad, y el personal es muy amable con los peludos. Esto lo hace aún más especial, ya que la experiencia se vuelve completa: buena comida, ambiente relajado y apertura total. En Samudaay, comer rico, barato y en compañía es más que una posibilidad, es parte de la filosofía del lugar. Un rincón que demuestra que la Roma aún tiene secretos que valen cada bocado… y cada peso.

3. Zuzú Cocina de Campo

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, en una casona que parece sacada del campo, pero en pleno corazón de la ciudad. Zuzú Cocina de Campo ofrece una experiencia acogedora con comida que reconforta, basada en ingredientes frescos y recetas caseras. Desde que entras, el olor a pan recién horneado y a guisos hechos con calma te envuelven. El espacio tiene un encanto rústico que lo hace perfecto para desconectarse del ritmo urbano. A pesar de su concepto cuidado, los precios son accesibles. Comer barato, rico y con sazón de hogar sí es posible aquí.

Es ideal para comida, especialmente si quieres escapar del bullicio sin salir de la Roma. Es ideal para familias, gracias a su ambiente tranquilo, decoración acogedora y platillos que gustan a grandes y chicos. El menú incluye desde desayunos con huevos de rancho hasta comidas completas con sopas, ensaladas y guisados que se sienten caseros. Aquí no hay pretensión, solo buena cocina con ingredientes honestos. También es una excelente opción para almuerzos largos o comidas de fin de semana con sobremesa. Un lugar que sabe cómo hacerte sentir como en casa, sin cobrarte como en restaurante de lujo.

El rango de precio es de $180 a $300 pesos mexicanos por persona, lo que resulta muy justo para la calidad, ambiente y porciones que ofrece. Muchos de sus platillos pueden compartirse o pedirse en versiones individuales sin que eso afecte tu presupuesto. También cuentan con menú del día que incluye entrada, plato fuerte y bebida por un precio amigable. Comer bien no tiene que ser sinónimo de complicarse, y en Zuzú todo fluye fácil y rico. Una excelente opción si quieres algo reconfortante sin pagar de más. Aquí se come con el alma, y sin que duela el bolsillo.

El restaurante admite mascotas, lo que lo convierte en un lugar perfecto para los paseos de fin de semana con tu lomito. Tiene terraza y espacios amplios donde las mascotas son bienvenidas y el ambiente es tan relajado que nadie se siente fuera de lugar. Este tipo de detalles hacen que Zuzú destaque en una zona donde a veces lo simple se pierde entre lo moderno. Comer barato, rico y con tu perro al lado no solo es posible, es parte del plan. Y con comida que sabe a campo y atención que sabe a hogar, regresar siempre se antoja.

4. Puerto Viejo Mariscos

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, en una esquina animada donde el olor a mar se mezcla con el bullicio de la ciudad. Puerto Viejo Mariscos es un verdadero hallazgo para los amantes de los sabores del mar que no quieren gastar demasiado. Su estilo es relajado, con mesas coloridas, cervezas frías y porciones que cumplen. Aquí el protagonismo lo tiene el sazón sinaloense: tacos gobernador, ceviches y cocteles frescos, todo a precios que sorprenden por lo justos. Comer mariscos en la Roma ya no es un lujo, es parte del menú.

Es ideal para comida, especialmente si se te antoja algo fresco, bien sazonado y sin complicaciones. Es ideal para amigos, por su ambiente relajado, platillos para compartir y música de fondo que pone el ambiente perfecto. Es uno de esos lugares que parecen hechos para la sobremesa larga y la charla sabrosa. Ya sea con una tostada o una michelada, aquí se disfruta con gusto. Y con porciones que realmente llenan, la experiencia se vuelve completa sin que la cuenta pese. Comer bien y sentirse en la playa, aunque estés en la ciudad, tiene su encanto.

El rango de precio es de $200 a $350 pesos mexicanos por persona, lo que se traduce en mariscos frescos, bien servidos y con buena presentación sin necesidad de gastar una fortuna. Puedes pedir varias entradas al centro o un plato fuerte con bebida y aún mantenerte dentro del presupuesto. Hay promociones que ayudan a estirar cada peso, especialmente si vas en grupo. En una zona como la Roma, este tipo de lugares se agradecen. Comer barato y con sabor de costa en pleno centro es más que una opción, es una realidad sabrosa.

El restaurante admite mascotas, así que no hay excusa para dejar a tu perro en casa si andas por la Roma. Las mesas al aire libre lo hacen ideal para disfrutar del sol, del sazón del mar y de la compañía peluda. Aquí todos son bienvenidos, y el ambiente relajado lo demuestra desde el primer momento. Este toque pet-friendly lo convierte en un lugar aún más completo para quienes buscan planes casuales sin complicarse. Puerto Viejo es ese lugar al que regresas porque todo se siente bien: la comida, el precio y la vibra.

5. Restaurante Mythos

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, justo en una zona donde los sabores internacionales se mezclan con el ritmo urbano. Mythos es una propuesta griega que ha sabido encontrar el equilibrio perfecto entre tradición, frescura y precio accesible. Desde que llegas, el ambiente mediterráneo, las mesas blancas y el aroma a especias te hacen sentir lejos del caos citadino. Es uno de esos lugares donde puedes comer bien sin tener que hacer fila ni romper el cochinito. Ideal para quienes quieren algo diferente, ligero y con mucho sabor.

Es ideal para comida, sobre todo si buscas una experiencia relajada, con porciones que satisfacen y platillos que salen rápido. Es ideal para parejas, por su atmósfera tranquila, sus platillos para compartir y la sensación de estar de viaje, aunque estés en plena Roma. Aquí puedes pedir desde una ensalada griega hasta un gyros con pan pita suave y carne jugosa. Todo está preparado al momento, y los ingredientes se sienten frescos desde el primer bocado. Comer aquí es simple, sabroso y sin pretensiones. Perfecto para una tarde soleada y sin prisa.

El rango de precio es de $200 a $350 pesos mexicanos por persona, lo cual es muy razonable considerando que se trata de cocina internacional. Puedes pedir un plato fuerte, compartir una entrada y tomar algo sin preocuparte por la cuenta. Incluso tienen menús del día o especiales que permiten ahorrar sin sacrificar sabor. En una colonia como la Roma, tener un restaurante de este tipo con precios accesibles es todo un acierto. Comer barato no siempre significa tacos o tortas; a veces también puede ser tzatziki y souvlaki.

El restaurante admite mascotas, lo cual lo convierte en una excelente opción si te gusta pasear con tu lomito por la Roma. Hay mesas exteriores donde puedes sentarte a comer con tranquilidad mientras tu perro descansa a tu lado. El ambiente es tan relajado que se vuelve fácil disfrutar sin preocuparse por detalles. Este tipo de lugares hacen que la colonia siga siendo uno de los mejores spots para comer rico, con buen ambiente y sin gastar demasiado. Mythos te lleva a Grecia sin salir de la CDMX… y sin vaciar tu cartera.

6. Restaurante Maíz Tinto

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, en una calle que invita a descubrir joyas gastronómicas con alma mexicana. Maíz Tinto es una celebración del maíz y la cocina tradicional, con un menú que rescata técnicas ancestrales sin dejar de ser accesible. Desde el primer vistazo, el lugar transmite calidez: mesas de madera, detalles artesanales y un ambiente que se siente auténtico. Aquí no hay pretensiones, solo cocina bien hecha con mucho corazón. Es el tipo de restaurante que sorprende por su sabor… y por su precio. Comer aquí es comer México, sin excesos.

Es ideal para comida, especialmente si estás en busca de platillos con raíces y preparación cuidadosa. Es ideal para familias, porque su ambiente es tranquilo, y los sabores son familiares pero con ese toque especial que los eleva. El menú cambia constantemente según temporada, lo que garantiza ingredientes frescos y propuestas siempre interesantes. Desde moles hasta antojitos reinventados, todo se sirve con respeto y creatividad. Es perfecto para sentarte largo rato y disfrutar con calma. Un espacio para reconectar con la cocina mexicana sin que tu bolsillo lo resienta.

El rango de precio es de $200 a $350 pesos mexicanos por persona, una maravilla si consideramos la calidad de ingredientes, técnica y porciones. Hay platillos individuales o para compartir, todos servidos con cuidado y a precios más que razonables. También cuentan con menús del día o especiales que varían, manteniéndose dentro del presupuesto. Comer cocina mexicana bien hecha no siempre tiene que significar pagar de más, y Maíz Tinto lo demuestra en cada platillo. Aquí, el maíz es protagonista, pero el ahorro también juega un buen papel.

El restaurante admite mascotas, por lo que puedes disfrutar de una comida deliciosa con tu lomito a tu lado. Tienen espacios al aire libre donde las mascotas son bienvenidas y donde el ambiente es tan relajado que se siente como estar en casa. Este tipo de apertura hace que comer aquí sea una experiencia aún más completa. Un restaurante pet-friendly, con sazón tradicional y precios accesibles no es tan común en la Roma… y por eso Maíz Tinto se vuelve especial. Comer barato también puede ser un acto de identidad y memoria, y este lugar lo honra con cada bocado.

7. Restaurante Fisher’s Roma-Condesa

5/5

Este restaurante se encuentra en la colonia Roma, justo en la frontera con Condesa, lo que lo hace ideal para quienes se mueven entre ambas zonas. Fisher’s es conocido por su propuesta de mariscos frescos, abundantes y con un sazón que nunca falla. Aunque es una marca reconocida, este local mantiene una vibra relajada, accesible y sin pretensiones. Aquí se come bien, se bebe bien y, con un poco de estrategia, se puede comer barato. Ideal para una comida casual con sabor a costa, sin salir del corazón de la ciudad.

Es ideal para comida, sobre todo si traes antojo de ceviches, cocteles o tacos del mar. Es ideal para amigos, ya que las porciones son generosas y se prestan para compartir varios platillos al centro. Su ambiente alegre y el servicio eficiente lo hacen perfecto para tardes largas, cervezas frías y buenos momentos. Además, es uno de esos lugares donde el menú nunca decepciona. Comer aquí es práctico, sabroso y sin complicaciones. Y si vas en grupo, siempre sale más rendidor.

El rango de precio es de $250 a $400 pesos mexicanos por persona, pero con opciones suficientes para armar una buena comida sin pasarte. Desde tostadas y tacos hasta menús del día, hay formas de mantener el gasto bajo control sin renunciar a la calidad. Fisher’s sabe cómo ofrecer mariscos a buen precio sin perder sabor ni frescura. Si divides platillos o aprovechas promociones, la experiencia se vuelve aún más accesible. Comer barato en la Roma, con mariscos bien servidos, es más posible de lo que imaginas.

El restaurante admite mascotas, lo cual es perfecto si paseas por la Roma o Condesa con tu perro y no quieres dejarlo fuera del plan. Las mesas exteriores son cómodas y están pensadas para una experiencia sin estrés. Este toque pet-friendly lo vuelve aún más popular entre quienes buscan lugares completos: buena comida, buen ambiente y apertura para todos. Fisher’s es una opción que cumple con todo, sin complicaciones y con mucho sabor. Comer rico y bien acompañado, incluso con tu lomito, es posible y hasta recomendable aquí.

Comer barato en la Roma… y seguirle por toda la ciudad

Comer en la Roma no tiene que ser un lujo. Estos siete restaurantes demuestran que se puede disfrutar de buena comida, con sazón auténtico y ambiente agradable, sin dejar el sueldo en la mesa. Desde propuestas internacionales hasta cocina tradicional con alma, la colonia tiene todo para quienes buscan experiencias sabrosas y precios honestos. Lo importante es saber buscar y dejarse sorprender por esos lugares que no están en todos los reflectores, pero que tienen todo para convertirse en tus favoritos. Comer barato en la Roma no solo es posible, es un estilo de vida.

Y si ya te quedaste con ganas de más, en nuestro blog encontrarás muchas otras rutas para descubrir lo mejor de la CDMX sin vaciar la cartera. ¿Antojos en la Condesa? ¿Brunch en Coyoacán? ¿Tacos en la Narvarte? Tenemos mapas gastronómicos llenos de sabor, antojo y buenos precios. Te invitamos a seguir explorando, a caminar con hambre y curiosidad, y a dejar que cada bocado te lleve a una nueva esquina de esta ciudad. Porque comer bien en la Roma es solo el comienzo de todo lo que esta ciudad tiene por servirte.

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